El blog de Carlos Sosa, director de Canarias Ahora
A ver a qué les suena
El escándalo del Palma Arena, en Baleares, con el ex presidente y ex ministro del PP Jaume Matas en el centro de la trama, es un ejemplo trasladable a muchos territorios de la España de la corrupción a través del ladrillo y la adjudicación de obra pública. A Matas lo ha dejado tirado el PP, pero sigue sin abrirle un expediente a la espera de lo que decida este lunes el juez que instruye el caso: si decreta su prisión eludible con una fianza de tres millones de euros, lo considerarán un truhán, pero si no acepta esas medidas propuestas por el Ministerio Público, en Génova son capaces de abrazar la doctrina Gürtel, aquella consistente desprestigiar al juez, a la Policía, a la Fiscalía Anticorrupción y la investigación en su conjunto, incluidas las intervenciones telefónicas practicadas en los últimos meses, cuando los imputados ya sabían las cosquillas que les buscaban. Que ya vendrá el Supremo a echar una manita. Analizando el caso Palma Arena, nos vienen a la memoria ejemplos muy propios de nuestro catálogo de especies protegidas. Pasen y vean.
El escándalo del Palma Arena, en Baleares, con el ex presidente y ex ministro del PP Jaume Matas en el centro de la trama, es un ejemplo trasladable a muchos territorios de la España de la corrupción a través del ladrillo y la adjudicación de obra pública. A Matas lo ha dejado tirado el PP, pero sigue sin abrirle un expediente a la espera de lo que decida este lunes el juez que instruye el caso: si decreta su prisión eludible con una fianza de tres millones de euros, lo considerarán un truhán, pero si no acepta esas medidas propuestas por el Ministerio Público, en Génova son capaces de abrazar la doctrina Gürtel, aquella consistente desprestigiar al juez, a la Policía, a la Fiscalía Anticorrupción y la investigación en su conjunto, incluidas las intervenciones telefónicas practicadas en los últimos meses, cuando los imputados ya sabían las cosquillas que les buscaban. Que ya vendrá el Supremo a echar una manita. Analizando el caso Palma Arena, nos vienen a la memoria ejemplos muy propios de nuestro catálogo de especies protegidas. Pasen y vean.