La verdad sobre el caso Botija

Impresionante documento, señoras y señores, el que va a salir de los tribunales de Santa María de Guía una vez se pongan negro sobre blanco las declaraciones que ante la jueza efectuó el otro día el concejal Teodoro Sosa, hasta hace poco responsable de Urbanismo y en la actualidad en la oposición con el protectorado del alcalde, para mejor proveer. Dijo en el juzgado Sosa, que acudía en calidad de imputado a defenderse de una querella presentada por el empresario Félix Santiago, que él ordenó cambiar el Plan General en Playa Canaria (antes Costa Botija) porque le habían soplado que en aquel subsuelo hay un negocio de piedra ornamental que podría alcanzar los 80.000 millones de las antiguas pesetas. Y se quedó tan pancho, oiga. Pero, ¿sabe realmente el señor Sosa lo que son 80.000 millones? ¿No habrá exagerado un poco, ya metido en gastos? ¿Quién es el portento que le ofreció esas cifras y en base a qué cálculos? No se lo pierdan porque, como siempre, hay negociete y amigotes detrás.

Impresionante documento, señoras y señores, el que va a salir de los tribunales de Santa María de Guía una vez se pongan negro sobre blanco las declaraciones que ante la jueza efectuó el otro día el concejal Teodoro Sosa, hasta hace poco responsable de Urbanismo y en la actualidad en la oposición con el protectorado del alcalde, para mejor proveer. Dijo en el juzgado Sosa, que acudía en calidad de imputado a defenderse de una querella presentada por el empresario Félix Santiago, que él ordenó cambiar el Plan General en Playa Canaria (antes Costa Botija) porque le habían soplado que en aquel subsuelo hay un negocio de piedra ornamental que podría alcanzar los 80.000 millones de las antiguas pesetas. Y se quedó tan pancho, oiga. Pero, ¿sabe realmente el señor Sosa lo que son 80.000 millones? ¿No habrá exagerado un poco, ya metido en gastos? ¿Quién es el portento que le ofreció esas cifras y en base a qué cálculos? No se lo pierdan porque, como siempre, hay negociete y amigotes detrás.