Veto en la capital mariana

Una vez ha quedado claro -y dicho en territorio comanche- que la capital mariana de Canarias es Candelaria, sólo nos queda encomendarnos a la protección de la Santa Patrona y dedicarnos al exclusivo ejercicio de la crítica política. No está exento de ella el grupo municipal de Gobierno de esa localidad tinerfeña, en manos de un PSOE que parece que sólo cree en la libertad de expresión cuando la ejerce su alcalde en Teror. Una emisora de radio, Radio Cadena Canarias, ha denunciado públicamente que el concejal de Fiestas, Alfredo Blas Arencibia, les ha vetado vilmente y les ha negado la acreditación para cubrir el XI Festival de la Canción de Candelaria, que allí debe ser muy importante. La emisora ha montado en cólera y ha aprovechado para acusar al grupo de gobierno de no respetar los derechos fundamentales. Gracias al festival de la canción nos hemos enterado de que, además, a la radio no le mandan los comunicados del Ayuntamiento y que la emisora local sólo abre sus micrófonos a los concejales mandamases.

Una vez ha quedado claro -y dicho en territorio comanche- que la capital mariana de Canarias es Candelaria, sólo nos queda encomendarnos a la protección de la Santa Patrona y dedicarnos al exclusivo ejercicio de la crítica política. No está exento de ella el grupo municipal de Gobierno de esa localidad tinerfeña, en manos de un PSOE que parece que sólo cree en la libertad de expresión cuando la ejerce su alcalde en Teror. Una emisora de radio, Radio Cadena Canarias, ha denunciado públicamente que el concejal de Fiestas, Alfredo Blas Arencibia, les ha vetado vilmente y les ha negado la acreditación para cubrir el XI Festival de la Canción de Candelaria, que allí debe ser muy importante. La emisora ha montado en cólera y ha aprovechado para acusar al grupo de gobierno de no respetar los derechos fundamentales. Gracias al festival de la canción nos hemos enterado de que, además, a la radio no le mandan los comunicados del Ayuntamiento y que la emisora local sólo abre sus micrófonos a los concejales mandamases.