Técnicos y técnicas de Medio Ambiente y Patrimonio Histórico del Cabildo de Gran Canaria, el Gobierno de Canarias y miembros del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil) participarán en una comisión que analizará con mayor profundidad las posibles afecciones que han sufrido el patrimonio arqueológico y natural de un espacio natural protegido y, también, Bien de Interés Cultural (BIC) que alberga el Barranco de Veneguera, en los que la promotora Costa Canaria Veneguera SA llevaba a cabo unas obras no autorizadas.
El presidente insular, Antonio Morales, aseguró que el Cabildo ya dispone de una primera aproximación de los daños provocados en elementos y materiales de la Zona Arqueológica de La Cañada de la Mar y en el espacio del yacimiento arqueológico de Playa de Veneguera-Fortaleza.
“Inicialmente, por parte de los Servicios de Medio Ambiente y de Patrimonio Histórico, se ha hecho un informe que tenían la obligación de tramitar de manera directa a la Fiscalía”, puntualizó, “y la próxima semana, se efectuará una evaluación más profunda acerca de las dimensiones de las actuaciones realizadas y de las afecciones al patrimonio arqueológico y natural”.
Y es que, como declaró, allí se está desarrollando una obra de recuperación de un espacio agrícola de uso tradicional y la intención del Cabildo es que ese proyecto se pueda llevar a cabo respetando los valores que tiene ese espacio. “Por el momento, se han paralizado las obras, hasta que esa comisión actúe y realice una valoración detallada de la situación”, concluyó.
Hasta ahora, el informe que tiene la Corporación insular, producto de la inspección realizada a finales del pasado mes de marzo por personal del Servicio de Patrimonio Histórico y por agentes el Servicio de Medio Ambiente, constata que las acciones de la citada promotora han generado daños irreversibles muy graves en el BIC Zona Arqueológica de La Cañada de la Mar.
En concreto, detalla que se han destruido casi en su totalidad cuatro estructuras de piedra seca y, además, han quedado expuestos a factores de deterioro los muros, depósitos y materiales que se habían conservado y que, ahora, podrían perderse de forma definitiva. Además, han originado la pérdida de parte del propio soporte de este BIC, que ha sido eliminado por los desmontes que fueron realizados en el margen este del barranco.
Por otro lado, en el yacimiento arqueológico Playa de Veneguera-Fortaleza, se ha observado que las obras han transformado parte del espacio, que ha sido aplanado por las máquinas que trabajaban en la zona.
La promotora se defiende: “Todo cuenta con las correspondientes autorizaciones”
Costa Canaria Veneguera SA ha negado los daños y ha desmentido las afirmaciones realizadas por la Corporación insular.
“Las actuaciones más relevantes que se han producido en el barranco lo fueron durante la ejecución del proyecto de urbanización aprobado definitivamente el 12 de mayo de 1980 (BOC nº 134 de 11 de junio de 1980), correspondiente a la primera fase del Plan Parcial aprobado por la antigua Comisión Provincial de Urbanismo el 29 de noviembre de 1977 (BOP nº 23 de 4 de enero de 1978) –es decir hace más de 40 años-”, dice la compañía.
“Obras que comportaban la erradicación de la explotación agrícola intensiva existente en la zona, la demolición de muchas edificaciones existentes, vinculadas a la agricultura, todo contando con las correspondientes autorizaciones, tal como se aprecia en las siguientes imágenes”, concluye.