Ya son cinco islas y varias decenas de colectivos sociales, ecologistas y medioambientales los que se han sumado a las manifestaciones que recorrerán las calles de Canarias el próximo día 20, ya conocido en redes sociales (donde se ha extendido rápidamente la convocatoria) como 20A. Bajo el lema Canarias tiene un límite, las protestas se centran en pedir un cambio de modelo económico y de desarrollo, que se ponga freno al crecimiento imparable de la actividad turística y medidas de protección hacia la población local, como trabas a la compra de viviendas por parte de extranjeros, más protección en los espacios naturales, una tasa turística y una moratoria en este sector.
La convocatoria nació en principio para la isla de Tenerife, pero ya se han sumado cuatro más, y ha sido entonces cuando se han producido las reacciones desde el Gobierno canario y la patronal hotelera. Tanto Fernando Clavijo, presidente del Ejecutivo regional, como la consejera de Turismo, Jéssica de León, y Ashotel (patronal hotelera y extrahotelera de la provincia de Santa Cruz de Tenerife) afirmaron este lunes estar preocupados por que se “ataque” al turismo, motor de la economía de las islas, y a los turistas. Sin embargo, basta con leer los anuncios de las convocatorias y los argumentos de los colectivos convocantes para observar que las protestas en ningún caso son contra el sector en sí, ni contra los visitantes, sino contra un modelo de desarrollo muy concreto y quienes lo fomentan cueste lo que cueste.
De hecho, tras las afirmaciones del Gobierno canario, la Cámara de Comercio de Tenerife, la patronal hotelera y el Cabildo de Tenerife, todas en la misma línea de afirmar que la protesta es contra el turismo, las redes sociales se llenaron de reacciones en las que se criticaba que estas instituciones no hubieran entendido “nada”.
“No es contra el turismo”
El documentalista galardonado Felipe Ravina, conocido entre otros trabajos por su cinta Salvar Tenerife, ha difundido un vídeo, del que se ha hecho eco la organización ecologista Greenpeace, en el que explica los motivos de las protestas y niega que estas sean en contra del sector turístico, como afirman desde el Gobierno y la patronal. De hecho, según Ravina, esta industria sería una de las más beneficiadas si se produjera un cambio en el modelo de desarrollo de las islas, pues podría ofrecerse una experiencia mejor para los visitantes.
Este es el vídeo de Ravina: