Hoy ha muerto el cineasta franco-suizo Jean-Luc Godard (París, 3 de diciembre de 1930—París, 13 de septiembre de 2022).
Su ópera prima, À bout de Souffle (Sin aliento o Al final de la escapada, 1960) es para muchos su mejor película. Para mí sin duda lo es, quizás y primordialmente por motivos nostálgicos, pues pasé mis años universitarios en París persiguiendo el sueño de convertirme en escritor y periodista.
Por aquel entonces aún se vendía el International Herald Tribune (IHT), originalmente New York Herald Tribune, el diario internacional propiedad de Whitney Communications, el Washington Post y el New York Times. Impreso en París, el IHT pretendía convertirse en el primer periódico global de habla inglesa. Cada vez que veo la película de Godard y escucho a la bellísima Jean Seberg vocear “¡New York Herald Tribune!” por las calles de París me saltan las lágrimas.
El IHT se quedó sin aliento en 2013 y hoy le tocó a Godard. Pero a más de uno siempre nos saltarán las lágrimas y nos quedaremos sin aliento con sus películas. Como bien encapsuló el periodista cultural Gilbert Salachas, À bout de Souffle es una historia sobre “robar, matar, querer, amar a alguien, no poder… y morir exhausto”.
Y en cuanto a la trascendencia del largometraje de Godard, el periodista Henry Jeason no pudo haberlo expresado mejor: “Dime si amas À bout de Souffle y te diré quién eres. Gracias a esta película maravillosa, el cine reconocerá a los suyos”.