Más de medio millón de personas han podido disfrutar de uno de los éxitos teatrales y comerciales más sonados de la historia del teatro en España, El método Grönholm, un texto del catalán Jordi Galcerán, que el próximo fin de semana se presenta en el teatro Cuyás, tras permanecer durante cuatro temporadas consecutivas en Madrid.
Un total de cinco funciones ha programado el Cuyás ?del 19 al 23 de enero- de esta obra que dirige la británica Tamzin Townsend e interpretan Carlos Hipólito, Jorge Roelas, Eleazar Ortiz y Cristina Marcos.
El método Gronholm, la segunda obra de Galcerán después de Palabras encadenadas, es una comedia que nace de una noticia aparecida hace algún tiempo en los periódicos en la que se aludía a una serie de documentos encontrados en un contenedor y pertenecientes al departamento de personal de una cadena de supermercados. Los comentarios de los seleccionadores estaban llenos de frases machistas, xenófobas y crueles del tipo “gorda, tetuda...”, “moraca, no sabe ni dar la mano...”, “voz de pito, parece idiota...”, explica el dramaturgo. “Imaginé a esas pobres chicas intentando dar una buena imagen de sí mismas, una imagen empresarialmente correcta, intentando hacer lo que creían que se esperaba de ellas, dispuestas a soportar incluso pequeñas humillaciones para conseguir ese trabajo que necesitaban”, señala el autor del texto.
“Todas las pruebas a las que son sometidos los aspirantes, por increíble que parezca, están inspiradas en técnicas reales de selección de personal, documentadas de los sesudos volúmenes escritos por especialistas del tema. Lo único que hace la obra es llevarlas hasta el extremo sin ocultar la comicidad que llevan implícita”, dice.
La idea del juego como metáfora de las relaciones humanas se convierte en ésta en un referente absoluto. Formalmente, la pieza juega a todos los niveles posibles: los personajes juegan entre sí y el público es invitado a participar con ellos, a intentar descubrir con ellos la verdad y la mentira, si eso es posible. El texto de Galcerán es realmente ágil e ingenioso y, sobre todo, comprensible para el espectador, salvando con habilidad las posibles dificultades de los juegos de enredo y confusión.
El éxito del montaje teatral llevó hace dos años a Marcelo Piñeyro a adaptar el texto de Galcerán al cine. Ha sido uno de los éxitos teatrales de todos los tiempos en España. En Madrid, por ejemplo se prorrogó en cartel durante cuatro temporadas seguidas, y llega al Teatro Cuyás después de varios años, debido precisamente a esa circunstancia.
La obra, que “está más fresca que el primer día”, según el actor Carlos Hipólito, retrata las relaciones que se establecen entre cuatro aspirantes a un puesto de trabajo en un proceso de selección de personal basado en el método del título, consistente en una serie de pruebas aparentemente absurdas. Hipólito, al que hemos visto en películas como Ninette o You're the one, de José Luis Garci, y en otros montajes como el que realizó Miguel Narros de El burlador de Sevilla, justificó el éxito cosechado por tratarse de un texto que “contiene un humor muy inteligente y consigue el milagro de gustar a un público de todas las edades”.
Actualmente, la obra se está representando en 14 países del mundo, entre ellos Alemania, donde hay contratadas veinte funciones, Argentina, México y Finlandia, donde comienza su segunda temporada. Londres y París estrenarán también la obra próximamente.