La música popular canaria perderá este año una de sus voces más señeras al dejar oficialmente los escenarios con una gira de despedida Mary Sánchez, quien, no obstante, ha prometido que no se cansará de cantar “nunca” porque, según ha asegurado, lo lleva “en la sangre”.
“Yo creo que ya cantaba en el vientre de mi madre”, ha afirmado la artista al presentar en rueda de prensa una gira en la que, desde finales de marzo a mediados de mayo, dará más de una decena de conciertos, la mayoría en su isla natal, Gran Canaria, pero pasando también por otras como Tenerife y Lanzarote, como culminación de 65 años de trayectoria profesional.
Una trayectoria que la llevó a cosechar aplausos multitudinarios desde el día en que, contando apenas 16 años de edad, se presentó ante el público de su ciudad, Las Palmas de Gran Canaria, en un concierto donde recibió “una lluvia de pétalos de rosa” del público que acudió entonces a escucharla al Teatro Pérez Galdós, ha rememorado.
En ese recinto que guarda para ella tan grato recuerdo (“lo tengo en mi cabeza, no se me olvida”, ha confesado al rememorar aquella jornada) será precisamente donde arranque en Gran Canaria su gira, que ha organizado la empresa Clapso Producciones bajo el nombre “Gracias por nacer canaria”.
Con él se ha pretendido rendir homenaje a una cantante que es “la más grande” que ha tenido Canarias en su estilo, ha sostenido el director musical de la gira, Germán Arias, compositor y arreglista habitual de los espectáculos de Clapso.
Arias ha subrayado que Mary Sánchez fue el equivalente a lo que actualmente se definiría como “una superventas” en sus momentos de más éxito, como prueba el hecho de que “probablemente sea la primera cantante canaria que ha triunfado a lo grande fuera de su tierra”.
“Estuvo hasta tres años sin pisarla, de gira por América”, ha recordado.
Y ha concluido que, por todo ello, considera “un honor y un orgullo” trabajar con ella en este espectáculo de despedida, que ha anticipado que “se plantea con un formato muy teatral”, en el que “los temas clásicos de Mary Sánchez van a tener un tratamiento distinto” en algunos casos pero en otros se mantendrán como siempre, porque, “si algo es bueno, mejor no tocarlo”, ha argumentado.
Además, Germán Arias ha anticipado que el montaje preparado para la ocasión permitirá no solo recordar canciones que pasaron a formar parte de la memoria colectiva de los isleños tras popularizarlas en su momento la artista, sino también hacer un recorrido por su historia personal que pondrá de relieve la verdadera dimensión de su figura y de sus logros.
Algo que se constatará al ver, ordenadas en proyecciones, imágenes en las que Mary Sánchez aparece en escenarios remotos o junto a estrellas internacionales de las primeras épocas en que triunfó más allá de las fronteras de su tierra y su país, cuando actuó “desde Nueva York hasta El Cairo”, o recortes de prensa del otro lado del Atlántico en los que se alababa su voz, ha dicho.
Arias ha destacado que todo ello debe verse, además, sin olvidar que los de Mary Sánchez son hitos que se dieron en los años cincuenta y sesenta, “cuando era mucho más difícil desarrollar una carrera internacional”, y más aún tratándose de una mujer.
De ello ha dado fe la propia cantante, al recordar cómo, cuando le propusieron viajar a Venezuela, con el primero de una serie de contratos que la llevarían finalmente a “conocer todas las naciones de Latinoamérica”, su madre le advirtió: “Si te casas, sí. Si no, no vas”. “Y entonces, me casé e hicimos esa gira”, ha añadido.
Mary Sánchez ha querido precisar, en todo caso, que, a sus 80 años, su principal sentimiento es de “profundo agradecimiento”, al público, a las autoridades, y a su madre, quien fue su inspiración desde que la oyera cantar, siendo niña.
En la presentación de esta gira de despedida, el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, la ciudad natal de Sánchez, Juan José Cardona, ha dicho que “el patrimonio cultural de Canarias no se entiende hoy sin su figura”.