Orishas hará un parón hasta abril tras sacar su nuevo disco

Yo-tú-él. Tres sílabas, tres personas que componen un nombre. Yotuel Romero es uno de los componentes de Orishas. Tras diez años mostrando su rap cubano al mundo, el grupo acaba de sacar al mercado Antidiótico, un recopilatorio con el que hace un parón para reflexionar, con la promesa de volver en abril con un nuevo disco bajo el brazo.

Antidiótico es el último disco de Orishas. Para los seguidores de un grupo, a veces da un poco de miedo ver en el mercado un disco recopilatorio, por si fuera una señal del final. ¿Es el caso de Orishas? Antidiótico

Cuando hablamos de tres emigrantes que han tenido que salir de su país, que han tenido que buscarse la vida, aprender un idioma nuevo y sentar unas bases desde cero, yo creo que diez años son muchos, así que era bueno hacer un parón y detenernos a ver lo que hemos conseguido hasta ahora. Pero volveremos pronto, por supuesto. De hecho, ya tenemos disco nuevo para el próximo año, en abril.

¿Os sentís embajadores de Cuba cuando giráis por el mundo?

Nosotros representamos a Cuba en todo. Somos cubanos, nos corre la sangre cubana, y de hecho nuestra música es rap con música cubana. Yo dejé Cuba con veinte años, siendo un chaval, pero todavía corre ron, sangre y guaguancó por las venas, y eso es imposible que se acabe.

¿Cómo era el panorama musical cubano cuando salisteis de allí?

Era bastante tradicional, la música que se escuchaba en Cuba era música totalitaria, rumba, guaguancó, y cuando volvimos con A lo cubano, Orishas dio un cambio a la música cubana, hasta entonces el rap no era un género seguido por las masas, y Orishas cambió esto, fue una locura este primer disco.

¿Tenía relación esta situación musical con el panorama político?

Sí, como siempre. Cuando empezamos a hacer nuestra música rap con el grupo Amenaza nos decían que hacíamos la música del enemigo y no entendían qué podíamos contar los raperos. Rompía con lo que había hasta entonces.

Los comienzos en Francia fueron difíciles?

Difíciles no, bastante duros. En la vida uno tiene momentos difíciles, pero cuando tiene momentos duros quita todo lo demás.

¿Qué se siente cuando se deja todo atrás para hacer lo que a uno le gusta y luchar por lo que se quiere?

En la vida ganan los luchadores. Yo creo que aunque la vida te ponga situaciones duras, hay que tratar de llenarse de energía y optimismo, y decir vamos a tirar para adelante, que nosotros podemos ganar esta dura batalla, podemos cruzar la montaña y cuando lleguemos al llano vamos a recoger la fruta y vamos a comerla tranquilos.

Después de tantos premios y de tener el reconocimiento del público, ¿qué esperáis ahora en el terreno profesional y en el personal?

Seguir sin decepcionar al público. Yo creo que lo principal, aunque yo sobre todo tenga proyectos fuera de Orishas, como cine o televisión, es que mi alma está en Orishas, y es como la base, es mi casa, jamás nunca me desprenderé de Orishas aunque tenga otros proyectos por hacer.

Hablas de proyectos en cine, ¿hay alguno a la vista?

Tengo un proyecto para finales de año de una película con un realizador mexicano, con la productora Iroko Films. He firmado un contrato con ellos. Es una película de época bastante bonita, basada en el siglo XIX. Y tengo otra posibilidad más adelante también en cine, para hacer en España, pero todavía no hay nada confirmado. En televisión me han propuesto varias cosas, pero ahora es muy difícil porque estamos girando con Orishas, y no tengo tiempo.

¿Encuentras puntos en común entre el cine y la música?

Lo bueno de actuar es que te transporta hacia otro universo donde no eres tú, mientras que la música siempre eres tú mismo, con tus letras, tus melodías. Sin embargo, cuando actúas tienes que ponerte en la piel de personas diferentes que no tienen nada que ver contigo, y eso es también bastante excitante.

Yotuel, tú también compones, ¿dónde buscas la inspiración para tus temas?

Ella me guía. A mí me encanta la música y siempre tengo la mente abierta para que llegue, me transmita y me diga. Tengo un estudio en casa, donde producimos el último disco de Orishas, y cuando me surge una idea, pues bajo rápido y la grabo.

Los temas sociales son bastante recurrentes en vuestras canciones, y sobre todo en los comienzos, estaban bastante relacionados con Cuba.

Sí, la sociedad es la que nos llena de experiencia y de canciones. Orishas es un grupo que viene de una condición de emigrantes que nos ha hecho ver la realidad día a día a pie de calle.

En Canarias, la inmigración es un tema que da mucho que hablar. ¿Qué mensaje transmitirías al público canario?

En primer lugar le diría que una de las grandes colonias de Canarias está en Cuba, de emigrantes canarios. No está tan lejos la emigración de España porque ha sido un país de emigrantes. Yo he dado la vuelta al mundo entero, y por donde quiera que vaya me encuentro siempre españoles y cubanos. No hay que frivolizar con esta cuestión ni discriminar a los inmigrantes, porque éste es un mundo de todos y para todos, y hay que integrarlos. No se puede frivolizar cuando la mitad de los españoles que emigraron eran españoles analfabetos que iban a trabajar en el campo, que iban a Cuba a trabajar en las bodegas, que iban a Suiza a trabajar en la construcción. La gente olvida muy pronto y a veces hay que recordarles quiénes son.

El público canario siempre os ha apoyado. La próxima semana vais a dar un concierto en Las Palmas para recaudar fondos para los damnificados a causa de los incendios, ¿es una forma de agradecer este apoyo?

Por supuesto. Para nosotros los canarios son como de nuestra casa, y si han tenido una tragedia, creemos que lo mejor que podemos hacer es aportar nuestro granito de arena y con las entradas del concierto, dar una parte a esta causa.

Por último, Yotuel, ¿qué es Orishas?

Orishas no sólo es un ejemplo para los latinos, sino también una esperanza. Una forma de demostrar a la gente que los emigrantes no venimos sólo a robar, sino que también venimos a hacer buena música. Nosotros somos tres cubanos que salimos de Cuba sin ningún tipo de ambición, sólo con muchas ganas de hacer música, y hoy tenemos la oportunidad de expresar muchas cosas.