MADRID, 15 (Portaltic/EP)
El presidente de la Asociación Española de Empresas de Vídeo (AEVIDEO), José Luis Carrera, aseguró hoy que la piratería en este sector ha provocado pérdidas en las arcas del Estado de 500 millones de euros en impuestos a lo largo de 2009.
Antes de entregar en el Congreso de los Diputados 40.000 firmas para protestar por “la excesiva lentitud” de la tramitación de la 'Ley Sinde', Carrera explicó en declaraciones a 'Portaltic' que los representantes videográficos sienten que el Gobierno les “está tomando el pelo”.
Según sus estimaciones, las pérdidas del año pasado corresponden a las cantidades que las administraciones públicas habrían percibido por el IRPF de los trabajadores, los impuestos de sociedades de las empresas o los impuestos de seguridad social. Asimismo, desveló que esta cifra ascendería a pérdidas de 15.000 millones de euros para las administraciones públicas en los últimos cuatro años, extrapoladas a todo el sector audiovisual.
El proyecto de Ley de Economía Sostenible --que contiene la disposición relativa a la piratería-- está a día de hoy a la espera de conocer las enmiendas de los partidos políticos en el Congreso. Posteriormente, será debatido por los diputados y, previsiblemente, finalizará su proceso parlamentario después del verano.
Carrera se mostró pesimista y señaló que el sector videográfico no espera la aprobación de esta medida hasta el mes de octubre. A su entender, el Gobierno “tiene miedo” de aprobar una medida que ya ha sido criticada y que sería “muy impopular”, mientras que la oposición “siempre que puede mete el dedo en el ojo”.
Por ello, diversos representantes de este sector han llevado las firmas de protesta por el retraso en un burro, como “metáfora” de la lentitud del Ejecutivo en este proceso. “Estamos muy cansados, llevamos varios años hablando con todo el mundo y tenemos la impresión de eque nos están tomando el pelo”, apuntó.
LA SGAE, “UN ACTOR SECUNDARIO”
El presidente de AEVIDEO criticó que la defensa de la piratería en España haya estado encabezada por la SGAE, ya que explicó que esta asociación es “un actor secundario” que no crea ni distribuye contenidos. “Si los ciudadanos continúan 'pirateando', el sector videográfico caerá, pero la SGAE seguiría gracias a los impuestos y a los canones”, señaló.
Además, recordó que la introducción “sibilina” del canon digital “ha perjudicado” al sector audiovisual, ya que ha servido de “justificación” a los ciudadnos para las descargas ilegales. “Somos los primeros enemigos del canon, ha hecho mucho daño y cuando se introdujo en el año 2001 no fue para sufragar las pérdidas de la piratería”.
Por último, respecto al futuro de los videoclubes, Carrera avanzó que “no tendrán más remedio que adaptarse” a nuevos modelos, tal y como ocurre en Estados Unidos con Netflix o Redbox, si bien apostó por su futuro. “Se da por muerto y caduco al sector del vídeo y esto no es así”, indicó.