Cristian Luis Ibáñez fue la temporada pasaba una de las piezas básicas del Santa Cruz ADEIN Tenerife Fundación CB Canarias. Líder en rebotes ofensivos de la Primera División de baloncesto en silla de ruedas 23/24, en la que campaña empezará en noviembre espera seguir aportando cosas al equipo. Cristian no duda a la hora de señalar que se ha conformado mejor grupo que el curso anterior, marcándose como meta estar en el top de la tabla.
¿Qué sensaciones te dejó la temporada pasada?
“Buenas globalmente por el trabajo del equipo. Personalmente no pensaba que fuésemos a llegar tan lejos. El objetivo era la permanencia, aguantar en media tabla y conformar un bloque. Sin embargo, al clasificarnos para los 'play-off' se dio la posibilidad de ascender, lo que al final no se logró. Pero acabé contento con la temporada viendo los recursos con los que contábamos”.
¿Cómo está siendo la pretemporada? ¿Dura?
“La llevo bien. Por temas personales estoy combinando los entrenamientos con la natación. Al igual que en los calentamientos de los partidos la anterior temporada, la fase actual de pretemporada se ha estructurado mejor, con nuevos ejercicios y mejor planteamiento. Creo que estamos en buena sintonía de seguir profesionalizando este equipo, ya que tener una buena base es indispensable”.
¿Qué esperas de la próxima liga?
“A nivel individual espero darlo todo. A nivel colectivo a pesar de, lamentablemente, no poder contar con Jaime esta temporada por causas del reglamento, con las que no estoy de acuerdo, seguimos teniendo la experiencia de jugadores en la plantilla de años anteriores. Si a esto incluimos las dos nuevas incorporaciones, que son jugadores experimentados, contamos con un mejor equipo. Dependerá como siempre de la química del grupo y la preparación previa en los entrenos.
En nuestra contra está que los rivales pueden celebrar partidos de pretemporada y llegar con ese rodaje al primer partido es importante para ellos. En cualquier caso, las expectativas están altas. Desde el minuto uno estaremos pensando en ganar. Con el equipo que tenemos debemos estar en el top de la tabla“.
En la liga pasada fuiste líder del aparado de rebotes ofensivos. ¿Es algo que trabajas especialmente?
“Mi trabajo en este equipo es jugar por dentro, rebotear, correr, defender y ayudar al equipo en todo lo posible, ser un activo. Para que engranen las piezas cada uno tiene que cumplir una función”.
¿Es un trabajo de mucho desgaste?
“Sí, pero me gusta darlo todo desde que entro y es algo que ya asumo de entrada”.
En la temporada pasada jugabas casi todos los minutos. No se veía que tuvieses un recambio claro.
“Son los recursos del equipo”.
¿Qué pueden aportar Chichirita y Parra?
“Chichirita es un todo terreno: tira, pasa, mueve la bola… En el partido que jugó contra nosotros aquí, sin menospreciar al resto, se veía que él hacía casi todo. Es un crack. Es el jugador que quieres tener en tu equipo sí o sí. Además, tiene muy buen tiro. Parra es excelente. Solo hay que ver su altura y su experiencia en la División de Honor. Será un punto a favor nuestro. Va a ayudar mucho y a ser una referencia”.
¿Hasta que punto esos fichajes pueden cambiar la forma de jugar que tenía el equipo hasta ahora?
“En el camino cada uno encontrará su rol. En principio creo que Parra será un referente abajo y un tirador. Chichirita también será tirador y nos dará velocidad. Yo aportaré lo que pueda. Cumpliré con mi función de meter físico y correr, ayudar al equipo y sacar buenos tiros bajo la zona. En cualquier caso, con el paso del tiempo se verá”.
¿El fichaje de Parra le descarga a usted de estar tan pendiente de los rebotes?
“El año pasado también teníamos a Jaime en esa función, que era un referente bajo el aro. Pero con la altura y manejo de silla de Parra tendremos un punto a favor”.
¿Qué rivales habrá que tener más en cuenta?
“Creo que en este año la liga estará más igualado y no te puedes fiar de ninguno. El Sureste tiene una buena estructura y eso hará que sigan siendo un referente en esta categoría. El Zuzenak también lo será. En cualquier caso, iremos viendo a los equipos a medida que avance la liga”.
¿Se hace difícil compaginar deporte con trabajo?
“Se consigue madrugando y programándote. Por las mañanas intento nadar, luego trabajo y por las tardes siempre estudio y luego entreno”.
En su caso, ¿el deporte es una válvula de escape?
“Totalmente. Empecé en el baloncesto en silla de ruedas cuando tenía 19 años, hace ya 15 de eso. Sin nadar, sin el gimnasio y sin el baloncesto en silla de ruedas no sería la persona que soy”.
¿Los viajes son tan estresantes para ustedes?
“Nosotros y el Sureste pagamos la insularidad. En la Península se pueden mover por carretera. Nosotros debemos viajar en avión, con lo que ello supone, con el desplazamiento de sillas de juego y para algunos compañeros también las sillas de paseo. Es una quemada. Muchas veces llegas de viaje el domingo a las once la noche y luego debes levantarte al día siguiente para ir a trabajar. Recordemos que de esto no se vive.
Me consta que lo de coger un avión un sábado a las siete de la mañana, almorzar un bocadillo y salir a jugar es algo común para muchos equipos de las islas de todos los deportes“.
¿Qué me puedes decir de la afición? ¿Cómo ha conseguido el ADEIN tener una comunión tan grande con la grada?
“Tras 15 años en el baloncesto en silla de ruedas, puedo decir que la nuestra es la cancha de mejor ambiente. Me gustaría que la instalación fuese mejor, pero debemos reconocer que pese a eso la gente se vuelca. La afición es nuestro sexto jugador”.
La liga empezará para el ADEIN el 9 de noviembre. En otras palabras, dos semanas más tarde que para el resto debido a los partidos de Daniel Parra con su selección. ¿Se les hará muy larga la pretemporada?
“Debemos estar centrados en el trabajo previo a la liga, porque eso se verá después durante la competición y no pensar en otra cosa”.