El Lenovo Tenerife superó este domingo con autoridad al Unicaja Málaga (64-97) para festejar su 19ª alegría liguera del curso. El grupo de Txus Vidorreta explotó su buen momento de forma, con otro gran ejercicio coral, cimentado en una defensa de lo más sólida y en unos tremendos porcentajes de acierto.
El equipo aurinegro dominó de principio a fin la contienda, jugando con un criterio enorme y enterrando cualquier atisbo de incertidumbre con un tercer cuarto brutal (7-27), para sacar del todo del partido a un Unicaja, que venía de ganar entre semana en la pista del líder Barça (63-73). Victoria de mucho nivel para seguir aferrados a la planta noble de la ACB.
Arrancó muy metido el conjunto insular, que marcó territorio de inicio (0-6), circulando el balón con mucha cabeza y fajándose bien atrás para amarrar bien las muchas prestaciones del perímetro malagueño, tan bien maniatado que se perdió en un mar de errores (1/7 al cierre del primer cuarto y 3/26 al final del partido) para ir ya a remolque durante todo el encuentro.
El control de las pérdidas por parte visitante y los primeros aciertos desde el 6,75 supusieron el primer arreón significativo: 4-17, tras un triple de Dejan Todorovic y dos de Sasu Salin. Lo intentaba el Unicaja con sus segundas opciones en ataque (hasta once rebotes ofensivos al descanso), pero no bastaba para devolver el equilibrio al pulso, ante un Canarias tremendamente sólido (15-24, min. 10).
Varias acciones de Rubén Guerrero y Cameron Oliver minimizaron daños para los anfitriones, pero Gio Shermadini ya daba señales de superioridad en la pintura (26-41), camino de otro partido de escándalo, por lo que el Lenovo Tenerife se iba a la pausa nueve arriba (32-41) y con buenas sensaciones, solo discutidas con un parcial de 6-0 justo antes del descanso.
A la vuelta de vestuarios, el Canarias despejó cualquier duda de manera contundente. Ocho puntos consecutivos de Aaron Doornekamp de entrada; la mejoría en el rebote defensivo (solo se escapó un rechace en el propio aro durante todo el tercer cuarto), tarea en la que sumó, y mucho, Sergio Rodríguez; el acierto en la dirección de Marce (ocho asistencias); y el dominio en la pintura de Gio propiciaron un parcial de 4-20 para romper ya el partido del todo (36-61).
Con el choque muy cuesta arriba para sus intereses, el Unicaja sufría entonces la versión más sólida de un Canarias que seguía sumando argumentos a la causa, con acciones de calidad de Fitipaldo, Sastre, Guerra y compañía. La fortaleza atrás de los aurinegros y dos triples consecutivos de Wiltjer y Todorovic mediado el último cuarto (45-80) confirmaban el recital canarista.
Apenas hubo respuesta en los locales para frenar a un equipo, el lagunero, que repartía minutos y sumaba nuevos aciertos de Sulejmanovic para allanar el 64-97 definitivo y confirmar así su segunda victoria más amplia de siempre, a domicilio (+33), en la Liga Endesa, por detrás del 62-109 (+37) conseguido en la 2017/18, en Sevilla, ante el Real Betis. Enorme festival de un equipo, el de Txus Vidorreta, que encara con puño de hierro un final de temporada plagado de desafíos.
UNICAJA: Alberto Díaz (-), Brizuela (7), Cameron Oliver (13), Barreiro (-) y Kravic (8)--quinteto inicial--, Bouteille (-), Jaime Fernández (6), Francis Alonso (11), Matt Mooney (4), Rubén Guerrero (8) y Nzosa (-).
LENOVO TENERIFE: Marcelinho (8), Salin (8),Todorivic (0), Shermadini (19) y Doornekam (8)--quinteto inicial--, Sulejmanovic (6), Fran Guerra (8), Fitipaldo (10), Sergio Rodríguez (2), Joan Sastre (8), Wiltjer (12) y Borg (-).
ÁRBITROS: Carlos Peruga, Vicente Bultó y Pablo Fernández.
INCIDENCIAS: Martín Carpena. Ante 4.147 espectadores.