El Herbalife Gran Canaria intentará este viernes a partir de las 21:00 horas eliminar al potente Real Madrid en la segunda semifinal de la Supercopa Endesa y acercarse a la conquista de su segundo título consecutivo en esta competición.
En esta ocasión además lo haría como anfitrión, algo que ningún equipo ha conseguido hasta la fecha.
El hecho de ostentar actualmente la condición de campeón de la Supercopa, unido a la competitiva plantilla que se ha configurado y jugar en su cancha con el respaldo de sus aficionados serían bazas suficientes para que el Herbalife Gran Canaria siguiese haciendo historia, pero enfrente tendrá a un equipo de primerísimo nivel como el Madrid.
Los antecedentes de ambos conjuntos en cuanto a la competición liguera se refiere son ilustrativos de la superioridad del conjunto madrileño, que ha ganado 37 de los 51 partidos disputados ante los amarillos.
El propio entrenador del Herbalife Gran Canaria, Luis Casimiro, reconocía que pese a las bajas de Sergio Llull y Luka Doncic el Madrid tiene un enorme potencial en su plantilla, con jugadores que pueden hacer olvidar perfectamente a los lesionados.
Una de las claves del choque entre el Gran Canaria y el Madrid de Pablo Laso puede estar en la dirección del juego, en el que se verán las caras el israelí Gal Mekel, recién incorporado al cuadro isleño tras disputar el Eurobasket, y el argentino Facundo Campazzo, que volverá a jugar con los blancos después de dos temporadas en las filas de UCAM Murcia.
El Herbalife parece llegar en un muy buen momento de forma a este encuentro, después de realizar una pretemporada en la que ha ido de menos a más en cuanto a resultados se refiere, y después de que sus seis nuevos jugadores están cada vez más integrados a los esquemas de Casimiro.
Por parte del Madrid, una de sus muchas figuras a tener en cuenta en esta semifinal que se presiente apasionante será el ala-pívot Anthony Randolph, flamante campeón de Europa con Eslovenia junto al joven y renqueante Doncic.