FRANKFURT (ALEMANIA), 16 (Reuters/EP)
El ministro alemán de Economía, Rainer Bruederle, se mostró este miércoles a satisfecho con la decisión de que la matriz estadounidense de Opel, General Motors, asuma la responsabilidad sobre la financiación del plan de reestructuración de su filial alemana, después que el Gobierno teutón denegara la concesión de avales a esta compañía.
Bruederle mostró sus deseos de que la decisión de Opel de revocar las ayudas solicitadas a los gobiernos en los que la compañía tiene presencia industrial en Europa sirva para que la empresa se centre de nuevo en fabricar automóviles.
“Opel tiene futuro si General Motors no la pone en riesgo”, explicó el titular de Industria de Alemania, que acaba de aprobar un plan de reducción de gasto para su país que tiene el objetivo de ahorrar 11.200 millones de euros.
La firma automovilística alemana anunció este miércoles su decisión de revocar todas las peticiones de avales realizadas a los gobiernos de los países en los que cuenta con presencia industrial en Europa, entre ellos España, que contempla la supresión de 8.300 empleos, 900 de ellos en Figueruelas (Zaragoza). En este sentido, indicó que buscará la financiación internamente.