El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) decidió este jueves recortar los tipos de interés de la zona euro en un cuarto de punto porcentual, hasta el 1%, lo que supone el nivel más bajo en la historia de la institución y que podría suponer el punto final al relajamiento de la política monetaria, según los expertos consultados.
En este sentido, los analistas de Citigroup, Bank of America y Morgan Stanley coinciden en pronosticar que el recorte de hoy supone el final de la serie de bajadas adoptadas por la institución desde el pasado 8 de octubre, que han llevado la tasa desde el 4,25% al 1% actual, y que, a partir de ahora, el BCE empleará medidas no convencionales para combatir la recesión.
Por su parte, el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean Claude Trichet, anunció este mismo que la institución suministrará liquidez a los bancos a través de operaciones de refinanciación con vencimiento a doce meses, así como la inclusión del Banco Europeo de Inversiones (BEI) entre las entidades que pueden tomar parte en sus operaciones de liquidez, y que el Eurosistema realizará compras de bonos garantizados denominados en euros.
En la tradicional rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno del BCE, que decidió por unanimidad recortar los tipos un cuarto de punto, hasta el mínimo histórico del 1%, el máximo responsable de política monetaria de la eurozona explicó que estas medidas “no convencionales” pretenden fomentar los préstamos bancarios y animar a las entidades a proporcionar préstamos.
“Estas decisiones han sido tomadas tras una profunda discusión por unanimidad para fomentar el relajamiento en los tipos de interés en los mercados monetarios y animar a los bancos a mantener y extender sus préstamos, así como para contribuir a la mejora de la liquidez en importantes segmentos del mercado de deuda privada y relajar las condiciones de financiación para los bancos y empresas”, señaló la entidad.
De este modo, los bancos contarán con una nueva operación de refinanciación “adicional a las ya existentes” con vencimiento a doce meses en la que el BCE proporcionará liquidez a un tipo fijo y que satisfará por completo las demandas de fondos de las entidades participantes.
Por otro lado, el presidente del BCE señaló que el Banco Europeo de Inversiones podrá participar en las operaciones de refinanciación de la institución desde el próximo 8 de julio.
Podría comprar 60.000 millones en bonos
Asimismo, Trichet anunció que el Consejo de Gobierno ha decidido “en principio” que el Eurosistema lleve a cabo compras de bonos garantizados denominados en euros emitidos en la eurozona y apuntó, a modo de referencia, que la cantidad podría rondar los 60.000 millones de euros. El BCE precisó que los detalles de estas operaciones serán comunicados en la próxima reunión del 4 de junio.
El banquero galo señaló que la decisión de comprar bonos garantizados denominados en euros se tomó al considerar que estos activos se habían visto “particularmente tocados” por las turbulencias financieras y subrayó que la institución no había adoptado ninguna otra decisión sobre ningún otro tipo de activos y quiso hacer hincapié que el BCE “no se ha embarcado en medidas de alivio cuantitativo”.
Síntomas de estabilización de la economía
Respecto a los tipos de interés, Trichet afirmó que “el actual nivel de tipos es apropiado”, aunque no quiso confirmar que se trate del nivel más bajo, y reconoció que la economía mundial, incluyendo la de la zona euro, experimenta una “severa” contracción, que se mantendrá durante el presente año, y pronosticó que sólo se producirá una recuperación “gradual” en 2010.
“Los últimos datos económicos sugieren signos tentativos de estabilización a niveles muy bajos, después de un primer trimestre considerablemente más débil de lo previsto”, dijo Trichet, quien admitió que el arranque de 2009 fue “muy malo”.
Por otro lado, Trichet indicó que las expectativas de inflación se mantienen “firmemente ancladas” de acuerdo con el objetivo de estabilidad de precios del BCE.
En este sentido, la institución emisora europea espera que las tasas de inflación continúen bajando y lleguen a situarse en terreno negativo durante algunos meses reflejando el importante descenso en los precios de las materias primas, aunque señaló que posteriormente se prevé un repunte de la inflación.