El comisario europeo de Economía y Asuntos Monetarios, Olli Rehn, ha instado al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a poner en marcha “tan rápido como sea posible” los ajustes a los que se ha comprometido. “Su aplicación de manera enérgica es de suma importancia”, ha explicado Rehn, que ha señalado la necesidad de que los objetivos de reducción de déficit se apliquen “de manera estricta, en especial a nivel regional”.
El responsable comunitario de Asuntos Económicos ha defendido que la política fiscal del Gobierno porque “va por el buen camino” y ha pedido “centrarse” en las medida “ya aprobadas” para asegurar su rápida puesta en marcha. Sólo si España o Italia se alejaran de estos objetivos, entonces se haría necesaria una acción “firme y rápida”, ha concedido Rehn.
En el caso de España, también ha subrayado la necesidad de continuar “firmemente” y concluir la reestructuración del sistema financiero, en especial la de las cajas, así como las reformas estructurales del mercado laboral. “Este trabajo tendrá que seguir realizándose con firmeza y llevarse a buen puerto. Así habrá garantías de que volverá al crecimiento sostenido y a crear empleo”, ha explicado.
No cree que España e Italia necesiten un rescate
Asimismo, afirma que España e Italia no van a necesitar un programa de apoyo por parte de sus socios, ya que “no estaría justificado” ante las medidas adoptadas, según ha asegurado el comisario europeo de Economía y Asuntos Monetario, Olli Rehn.
“No, no creo que España e Italia vayan a necesitar un programa especial porque las bases de sus economías no lo justifican”, ha dicho Rehn en una rueda de prensa en Bruselas, al ser preguntado por si pondría la mano en el fuego por estos dos países. Además, ha destacado que ambos se encuentran en vías de cumplir los objetivos marcados en política fiscal.
En este sentido, Rehn subrayó que la presión de los mercados financieros sobre la deuda española e italiana “no es comprensible”, aunque ha recordado a España que la implementación de las medidas adoptadas es “crucial y crítica”.
Así, Rehn recalcó que la inquietud de los mercados financieros no se justifica exclusivamente por hechos económicos, porque las bases de ambos países no han cambiado “de la noche a la mañana”, e incidió en que las dos economías se han comprometido a adoptar medidas “muy ambiciosas de consolidación fiscal” que ya están poniendo en práctica. Incluso consideró “relativamente positiva” la subasta de bonos españoles a tres y cinco años que se celebró el jueves.
España, ha dicho el comisario, ha realizado “grandes progresos” en lo que se refiere a consolidación fiscal, reestructuración del sector bancario y reformas del mercado laboral y de productos, pero su rápida implementación es “crucial y crítica”.