SANTANDER, 29 (EUROPA PRESS)
El presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Julio Segura, ha reconocido que se ha detectado “una mala práctica importante” en la comercialización de participaciones preferentes, productos financieros complejos en los que se han visto atrapados miles de ahorradores en España.
“Es normal que haya un mal sabor de boca generalizado porque hay mucha evidencia de que ha habido una práctica importante de mala comercialización. Sin lugar a dudas”, sostuvo Segura en relación a este producto de carácter perpetuo, híbrido entre renta fija y variable cuya remuneración depende de la existencia de beneficios y de determinados niveles de solvencia.
El presidente de la CNMV recalcó que “no se puede prohibir que se coloquen instrumentos financieros complejos a inversores no especializados” dado que lo permite la legislación europea, y que el organismo se centra en vigilar que se cumple la ley en cuanto a la venta de productos financieros.
“A usted le puede parecer un disparate, pero en la CNMV nos pagan por que se cumpla la legislación vigente, no por interpretar lo que nos gusta y lo que no”, respondió a una pregunta formulada en la clausura del seminario de la UIMP sobre el futuro del euro organizado por la APIE y el BBVA. “No sé quién tendrá la culpa, pero en la CNMV no somos más que supervisores, no reguladores”, insistió.
A raíz de sus tareas de inspección, la CNMV ha abierto siete expedientes informativos entre las 18 entidades financieras que han comercializado participaciones preferentes que podrían dar lugar a sanciones cuando se resuelvan dentro de un año. Estos expedientes afectan a la mitad del valor de las emisiones vivas de participaciones preferentes, especificó Segura.
Asimismo, el organismo ha enviado un total de quince propuestas de cambios legislativos para productos financieros complejos como las participaciones preferentes tanto a este Gobierno como al anterior, sin que haya arrancado ninguna iniciativa en este sentido.
Segura apuntó que entidades que han comercializado participaciones preferentes han ofrecido a sus clientes la posibilidad de canjearlas por otros productos, solución que se presenta “más complicada” en el caso de las que han sido nacionalizadas por el Estado a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), ya que sus propuestas han de ser aprobadas por Bruselas.