El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, ha dicho este martes que las cifras del desempleo son “muy negativas”, aunque ha garantizado la protección de los ciudadanos ante la actual situación económica.
Según los datos conocidos este martes, el paro registrado en octubre se incrementó en 192.658 personas respecto a septiembre, lo que situó el número total de desempleados en 2.818.026, el 7,34% más que un mes antes y la mayor cifra de parados desde abril de 1996.
Corbacho ha destacado que se trata de una cifra que “dobla la del mes pasado y que va en la dirección de lo que ya, desgraciadamente, forma parte de las previsiones, que son que el paro va a seguir creciendo hasta llegar a superar la cifra prevista para este año y la que el Gobierno barajaba para el año próximo del 12,5%”.
Aunque la cifra es “mala”, el ministro ha resaltado que “por suerte, en España el sistema de protección no deja caer a nadie, es un país en el que los ciudadanos no van a quedar desprotegidos independientemente de la situación económica”.
Ha apuntado que este aumento del desempleo se produce en un período de crisis que afecta a toda Europa, “por lo tanto vamos a tener que convivir con ella durante algunos meses pues todas las informaciones indican que hasta mitad de 2009 los efectos de la crisis se van a dejar notar”.
Con respecto a la posibilidad de que el Gobierno pueda adoptar nuevas medidas para paliar la crisis, ha manifestado que “si dentro de unos meses hay que adoptar algunas complementarias lo haremos, intervendremos en lo que tengamos que hacer para garantizar el desarrollo de la economía”.
El ministro se ha referido a las previsiones realizadas por el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Gerardo Díaz Ferrán, quien ha augurado que el paro puede superar el 16 por ciento y acercarse al 17 por ciento de la población activa en 2010.
Corbacho ha señalado que cree que estas previsiones son “un poco exageradas” pues aunque “evidentemente el paro va a seguir creciendo no lo hará hasta esos porcentajes”.
Ha destacado la necesidad “urgente” de que, en un momento como el presente, las entidades financieras “pongan dinero para ayudar a las pymes que actualmente tienen graves problemas no sólo por la bajada de las expectativas de negocio, sino por la carencia de recursos financieros”.