Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), de la Universidad de Lleida y de la Universidad de Alcalá han desarrollado un modelo para predecir el riesgo de incendios a largo plazo causados por la acción humana, que destaca la tasa de paro como una de las 29 variables de riesgo que inducen al hombre a provocarlos.
“Esto puede hacer que la población vea en la extinción de incendios y en la recuperación de las zonas afectadas una fuente de empleo, como se ha demostrado en algunas zonas del sur de Italia”, explicó el investigador del CSIC, Jesús Martínez, al tiempo que señaló que el índice no pretende ser una estimación de riesgo a corto plazo (diaria o semanal), que se suele hacer con parámetros meteorológicos, sino que analiza el riesgo a largo plazo, más permanente y estable.
Concretamente, más del 90% de los incendios forestales en España se deben directa o indirectamente a la acción del hombre, mientras que los factores humanos apenas son tenidos en cuenta en los análisis e índices de riesgo utilizados.
Así, la fragmentación del paisaje rural, la maquinaria agrícola y la densidad de ganado en régimen extensivo tradicional pueden considerarse como las principales variables de riesgo, según los expertos; además de factores socioeconómicos como la mencionada tasa de paro, el éxodo rural o el incremento de población.
El modelo creado, el primero de este tipo en España, identifica como zonas de mayor peligro Galicia, la cornisa cantábrica y los litorales catalán y valenciano, junto con diversos puntos del interior de España. Igualmente, permite crear modelos a escala regional, por lo que en Madrid, por ejemplo, el factor de riesgo más importante es la zona de transición urbano-forestal; en Aragón, la zona de transición entre la zona agrícola y la forestal y en Galicia, la fragmentación del paisaje agrario.
Para crear el índice, los investigadores analizaron datos de los incendios forestales ocurridos en 6.006 municipios de todo el país durante el periodo 1988-2000 (todos excepto los de Navarra y las islas Canarias, por falta de datos). En cuanto a las variables de riesgo, fueron elaboradas a partir de fuentes cartográficas digitales, análisis con sistemas de información geográfica y fuentes censales diversas.
En total, se han identificado 29 variables de riesgo, que se agrupan en siete grandes bloques (factores): transformaciones socioeconómicas de áreas rurales, transformaciones socioeconómicas de áreas urbanas, persistencia o transformación de actividades tradicionales ligadas al fuego en áreas rurales, accidentes o negligencias relacionadas con infraestructuras eléctricas, de transporte y otros, estructura del paisaje y de la población , política forestal y factores relacionados con fuegos intencionados.