Los socios privados de la empresa mixta de aguas de la capital grancanaria, Emalsa, se han mostrado dispuestos a aceptar la petición del Ayuntamiento de retirar a su filial Sercanarias la gestión del servicio de saneamiento del agua de la ciudad. Además, están decididos a sacar a concurso público esos trabajos para adjudicárselos a otra compañía, un procedimiento en el que esta empresa estará vetada, puesto que uno de los requisitos del actual gobierno municipal es que “no se pueda presentar”.
Así lo ha anunciado este jueves el alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, Agusto Hidalgo (PSOE), tras finalizar la reunión que ha celebrado el consejo de administración de Emalsa. Se trata del primero tras el cambio de gobierno en el Consistorio, en el que ha tomado posesión como nuevo presidente de la empresa.
Sercanarias, empresa constituida por los dos socios privados del ayuntamiento en la compañía de aguas, Saur y Valoriza, será oficialmente excluida de la gestión de los servicios de saneamiento cuando sea aprobado por el consejo de administración en una próxima reunión. No obstante, el alcalde ha recalcado que el personal que trabaja en dicha filial será incorporado en la empresa que gane el concurso a través del contrato de subrogación. Asimismo, informa de que aún no hay fecha para dicho concurso público, ya que primero es necesario elaborar el pliego.
Hidalgo recuerda que su partido se ha mostrado especialmente crítico con la forma en la que Emalsa adjudicó el saneamiento de la ciudad a Sercanarias. De hecho, el ultimo informe del Interventor recoge que se trató de una “subcontratación irregular” ya que esta entidad realiza la mayor parte de las obligaciones derivadas del contrato de saneamiento. También refleja que se podría haber producido una subrogación del contrato sin que el titular del servicio lo haya autorizado.
Otro punto que afecta a esta filial es el hecho de que el anterior gobierno del Ayuntamiento, conformado por el PP, haya dejado de pagar desde el año 2013 la gestión del saneamiento. El primer edil señala que los populares pidieron una auditoría para conocer el coste real de este servicio en el año 2013 y 2014 , asimismo quiere conocer por qué no se hizo efectivo el pago.
“Algo tendremos que pagar por este servicio nosotros”, puntualiza Hidalgo, quien recuerda que el agujero que ha dejado el anterior gobierno en esta empresa asciende a más de 15 millones de euros, según el interventor. El primer edil agrega que si se reúnen los requisitos para poder pagar se hará en cuanto sea posible. Y es que, estas partidas no estaban presupuestadas en las cuentas de 2015.
Un informe muestra los puntos de “conflictividad” en los últimos 20 años
Otro de los temas tratados en este consejo de Emalsa ha sido el resultado del informe de la compañía KPMG. Un estudio encargado por Emalsa durante el anterior mandato. En él se refleja la problemática en cómo se realizó la privatización del agua de la ciudad y cómo se efectuó la posterior gestión para el saneamiento.
“Se trata de un estudio intenso”, asegura el alcalde de la ciudad. De hecho, en él se recogen los principales puntos de conflictividad de los últimos 20 años. Estas irregularidades están relacionadas con el saneamiento, infraestructuras... Una serie de problemas a los que el nuevo gobierno municipal espera ir poniéndole cara y solución.
“Estamos empezando a trabajar para que el control de aguas sea efectivo”, afirma el primer edil. Hidalgo también explica que los puntos de este informe se irán desglosando en las próximas semanas.
Tarifa social de agua
El primer edil de la capital grancanaria destaca que su principal objetivo es trabajar por la tarifa social del agua. Según destaca, el expediente para cumplir con ello ya está tramitado. Para Hidalgo, la misión de su gobierno se centra en que “la personas que estén pasándolo mal económicamente no se vean privados de este servicio público”.
En un breve período de tiempo el consistorio dispondrá de los informes que tendrá que consensuar con los socios privados de Emalsa. En este sentido, subraya que estas empresas se han mostrado conformes con la iniciativa del tripartito.
El alcalde anunció que lo más probable es que en un futuro se tenga que reordenar toda la estructura tarifaria. Para Hidalgo, el informe “nos va a poner pautas para que sepamos si lo que se cobra a los ciudadanos se corresponde con los costes de la empresa”, en definitiva, protocolizarlo de manera de que la gente no tenga dudas sobre este tema.
Para el actual gobierno municipal, lo ideal sería lograr la remunicipalización de la empresa mixta de aguas a coste cero. Sin embargo, esta opción ahora mismo “no está encima de la mesa” porque el escenario con el que se han encontrado no es ese.
Hidalgo puntualiza que son muchos los aceptos en los que hay que poner orden en Emalsa. Además, expresó que si le llegara información de que el anterior gobierno gobierno tiene alguna responsabilidad sobre las irregularidades o hubiera algún indicio delictivo iría a los tribunales. No obstante, ha asegurado que “no quiere entrar en esa dinámica absurda” de acusar al anterior mandato, ya que considera que él le tiene respeto al sillón de la Alcaldía, “ a diferencia de otros que no se la han tenido”.