Los empresarios de importación de Canarias han celebrado este miércoles una rueda de prensa en la que han solicitado la eliminación del AIEM, un impuesto canario único en Europa que grava las importaciones de los productos que se elaboran en el Archipiélago. El presidente de la Asociación de Empresarios de Mercalaspalmas (ASEMERCA), Juan Armando Rodríguez, considera que “todo tema impositivo influye en la cadena de precios”, pero al mismo tiempo, el presidente de la Asociación de Importadores de Papas de Gran Canaria (ADIPA), Juan Luis Pulido, ha reconocido que el mercado “coloca” el valor de los alimentos, lo que deja en el aire el posible efecto de cualquier regulación por parte de las administraciones.
Tanto Armando Rodríguez como Luis Pulido han solicitado la supresión del Arbitrio sobre la Importación y la Entrega de las Mercancías (AIEM), un tributo que grava las importaciones de hasta 156 productos que se elaboran en Canarias, como el agua embotellada (al que se le aplica un tipo del (5%), el chocolate (10%) o los huevos frescos (15%), y que en su opinión encarece el coste de la cesta de la compra en las Islas. “El Gobierno de Canarias dice que no puede bajar los precios, pero sí que puede. Hay mucha necesidad en esta comunidad y no puede ser que las arcas [autonómicas] se sigan llenando a costa de los canarios”, dijo Luis Pulido.
Los empresarios mencionados han puesto como ejemplo las papas, un alimento básico en el hogar de la mayoría de los canarios. Aseguran que un 34% de ese producto se elabora en Canarias, pero que el 66% restante es importado y se ve sometido a un tipo impositivo del AIEM del 15% desde 2021, cuando se realizó la última revisión del arancel. Para ambos representantes de la patronal, el precio de las papas se reduciría igualmente en un 15% si se eliminara ese gravamen. “Es un tributo insolidario. Estamos preocupados y queremos que todas las familias en riesgo de exclusión social puedan comprar un kilo de este producto”, continuó el presidente de ADIPA.
El problema, reconocido hasta por los propios empresarios, es que el valor de los alimentos en las grandes superficies lo marca el mercado, por lo que es difícil predecir si la rebaja de cualquier impuesto, en este caso del AIEM, pensado para beneficiar el producto local, tendría repercusión en el mismo.
El Gobierno de Canarias considera que el importe de los productos viene determinado por la competencia interna en un mercado tan pequeño como el de las Islas. Y que, si realmente el AIEM influyese en la cesta de la compra, eso se vería reflejado en la evolución del IPC de alimentos y bebidas no alcohólicas, cuya variación anual en el Archipiélago siempre ha estado por debajo de la media nacional, como demuestran los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Además, el argumento utilizado por los importadores de que el citado impuesto sitúa el precio de los alimentos en las Islas por encima de los registrados en la Península, no es del todo cierto. El último informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) especifica que en las ciudades de Barcelona, Huesca, Madrid, Oviedo, Girona o Bilbao se destina incluso más que en las capitales provinciales de Canarias.
Por otro lado, este martes, Nueva Canarias, partido que forma parte de la coalición de gobierno en el Ejecutivo regional, ha propuesto fijar un tope temporal en los precios de algunos alimentos básicos. El portavoz de la formación nacionalista, Luis Campo, recordó que se han presentado numerosas denuncias por parte de las organizaciones de consumidores ante la “inaplicación” de la baja del IVA acordada por el Gobierno central. Y agregó que, del mismo modo que se ha hecho en el mercado eléctrico y del alquiler, una medida similar podría atenuar los efectos de la mayor inflación registrada en décadas.
“Si ha habido capacidad para fijar precios máximos en dos áreas fundamentales, ¿por qué no tomar una decisión igual con la tercera estratégica, como son los alimentos?”, cuestionó Campos. “[Ha llegado el momento] de intervenir inicialmente a través del diálogo, la negociación y el consenso mediante la adopción de medidas excepcionales que garanticen el bienestar de la mayoría social”, añadió el político de NC.
Las declaraciones de Campos llegan días después de que el líder de los nacionalistas y vicepresidente del Ejecutivo autonómico, Román Rodríguez, señalara directamente a las grandes superficies, a las que acusó de estar “abusando” y haber creado un “mercado trucado” en el que “suben los precios cuando les da la gana”. En palabras de los empresarios de importación, tanto de ASEMERCA como de ADIPA, “esto es un mercado libre” y “[los políticos] están para gestionar, no para inmovilizar”.
En este sentido, el abogado de la Asociación de Usuarios de Servicios de Canarias (AUSCAN), Francisco Palero, pidió hace una semana en este periódico que “si lo que se quiere es bajar los precios, que se pongan de acuerdo y lo hagan”. Pero no le parece bien que se exija una eliminación del AIEM porque “[algunos] están aprovechando las circunstancias para tener un marco impositivo menor”.