España recupera parte de la competitividad perdida durante la crisis

GINEBRA, 7 (EUROPA PRESS)

La economía española ha recuperado parte de la competitividad perdida durante la crisis al ascender hasta el puesto 36, desde el 42 del año pasado, en el ranking elaborado por el Foro Económico Mundial (FEM), que compara el grado de competitividad de 142 economías y que vuelve a estar encabezado por Suiza.

En el caso de España, el 'Informe de competitividad global 2011-2012', elaborado por un equipo de economistas dirigido por el español Xavier Sala-i-Martín, en el que también ha participado Beñat Bilbao-Osorio, destaca que “ha recuperado parte del terreno perdido tras dos años de acusada caída”, ya que en el informe del año pasado figuraba en el puesto número 42, tras iniciar la crisis en el puesto 29.

“El progreso de este año puede atribuirse a ligeras mejoras en varias áreas, así como al deterioro experimentado por la competitividad de otras economías que precedían a España”, explican los autores.

En este sentido, el informe destaca que, “a pesar de la floja recuperación económica y del importante debilitamiento de su estabilidad macroeconómica (puesto 84 desde el 66), el país ha conseguido mejorar clasificación por un mayor uso de la tecnología de la información (24 desde 29) y a su fortaleza inversora en I+D, así como a una mejora de la capacidad innovadora”.

“Ahondar en la mejora de estos elementos favorecedores del crecimiento resultará crucial para la futura recuperación de su economía y una muy necesaria transformación económica”, añaden los autores.

Asimismo, el FEM advierte de que “en líneas generales la competitividad española se ve perjudicada por sus desequilibrios macroeconómicos”, entre los que presta especial atención a un “muy alto y creciente déficit público (puesto 134), un alto nivel de deuda pública (108) y un prolongado nivel bajo de ahorro (83)”, que, a su jucio, ha provocado “un elevado grado de angustia en sus mercados financieros y está asfixiando el acceso a los recursos financieros, lo que pone en peligro los futuros planes de inversión”.

Según la nueva edición del 'ranking' mundial de competitividad, España se codea con países como Puerto Rico (35) o Bahrein (37) y se destaca respecto a Italia (43), Portugal (45) y Grecia (90), mientras que sigue lejos de otros países de la eurozona como Finlandia (4), Alemania (6), Países Bajos (7), Bélgica (15), Francia (18) o Irlanda (29).

Entre los países que destacan por su nivel de competitividad, aparte de Suiza que vuelve a encabezar el listado, Singapur avanza un puesto y se sitúa en segundo lugar, por delante de Suecia. Por su parte, EEUU se sitúa quinto, Japón noveno y Reino Unido décimo.

SON NECESARIAS MÁS REFORMAS

Por otra parte, el informe subraya que para reducir estos desequilibrios macroeconómicos no es suficiente con recortar el déficit, sino que resulta “prioritario a corto plazo” adoptar las reformas necesarias para impulsar el crecimiento.

En este sentido, el FEM considera “preocupantes” las rigideces existentes en el mercado laboral (puesto 134) tanto en términos de contratación como de despido (puesto 137), así como por la “desconexión” existente entre la fijación de los salarios y la productividad (puesto 126), lo que erosionó en la última década la competitividad internacional del país.

“Estas rigideces no permitieron un rápido ajuste tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria y han dejado a una sustancial proporción de la fuerza laboral fuera del empleo”, subraya el informe, que considera “inadecuado” el sistema educativo español, ya que, pese a contar con uno de los mayores niveles de estudiantes matriculados (3ªposición en educación secundaria y 18º en universitaria) “parece fracasar a la hora de dotar a gran parte de la pobración de las habilidades necesarias para participar en una economía cada vez más dirigida por el conocimiento”.