La reunión este fin de semana del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, con los principales empresarios del país ha sido acogida con frialdad tanto desde la Confederación Canaria de Empresarios (CCE) como del sindicato UGT.
“No hacía falta esa reunión”, dijo José Cristóbal García, secretario general de la CCE, en declaraciones al programa El Correíllo de CANARIAS AHORA RADIO. De esta “fórmula atípica” elegida por Zapatero dijo que se dio voz a “empresarios que sólo se representan a sí mismos” sin que hubiera presencia de las Pymes, “que representan el 90% de las empresas de nuestro país”, y que lo principal es que el Gobierno central acometa las reformas, no que se las comunique a la élite empresarial. Asimismo, García admitió que “algunos” de los presentes en la reunión forman parte de los mismos mercados financieros a los que dijeron que hay que calmar.
Gustavo Santana, secretario general de UGT en Gran Canaria, dijo que del encuentro del sábado habrá podido salir una “foto positiva de cara al exterior para tranquilizar a los mercados”, pero que los empresarios presentes “son los primeros que deben estimular la economía y la creación de empleo”.
Y criticó asimismo este representante sindical que las reformas que se pide los círculos empresariales cuentan con la oposición de UGT, como la de las cajas de ahorros o la de las pensiones, que a su juicio “traspasa todas las líneas rojas” y se sitúa “fuera del Pacto de Toledo”.