BOSTON, 15 (EUROPA PRESS)
El presidente de la Reserva Federal, Ben S. Bernanke, ha afirmado que existen “argumentos” para nuevas medidas de estímulo y ha asegurado que la institución “está preparada” para adoptar dichas medidas adicionales en caso de que se necesario para apoyar la recuperación económica y devolver la inflación a niveles coherentes con el mandado de la Fed.
Durante una conferencia en la Reserva Federal de Boston, Bernanke explicó que es “ciertamente posible” una mayor política acomodaticia, incluso con los tipos de interés cercanos a cero, aunque recalcó que las políticas no convencionales tienen “costes y limitaciones” que deben ser tenidos en cuenta a la hora de juzgar con que “agresividad” se deben utilizar.
En esta línea, remarcó, que a la hora de tener en cuenta nuevas medidas, el El Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) tendrá en cuenta esos potenciales costes y riesgos de las políticas no convencionales y, como es habitual, las decisiones del Comité están supeditadas a los próximas informaciones sobre la previsión económica y las condiciones financieras.
Asimismo, el presidente de la Reserva Federal consideró que la evidencia empírica sugiere que el programa de compra de activos que llevó a cabo la Fed tuvo un efecto “positivo” en la recuperación económica, al igual que el programa puesto en marcha por el Banco de Inglaterra.
Sin embargo, recalcó que una de las desventajas de la compra de activos relacionada con las política monetaria convencional es que la institución tiene “mucha menos experiencia” a la hora de los juzgar los efectos económicos de esta medida, lo que hace más difícil determinar la cantidad y el ritmo de dichas compras. Así, señaló que estos factores han hecho que la Fed actúe con cierta cautela a la hora de decidir si realiza nuevas compras de valores a largo plazo.
Bernanke también reconoció que existen muchos desafíos a la hora de comunicar y dirigir la política monetaria en un entorno de baja inflación, entre los que destacó la incertidumbre asociada al uso de herramientas no convencionales. “A pesar de estos desafíos, la Reserva Federal sigue comprometida en desarrollar políticas que promuevan nuestros objetivos de máximo empleo y estabilidad de precios”, insistió.
LA REDUCCIÓN DEL DESEMPLEO, LENTA.
Asimismo, recordó que, una de las implicaciones de un entorno de baja inflación es que la política monetaria es probable que esté más limitada por el hecho de que los tipos de interés no pueden reducirse por debajo de cero y recordó que la Reserva Federal ya redujo los tipos hasta un rango de entre 0 y 25 puntos básicos hace casi dos año, en diciembre de 2008.
Respecto al desempleo, Bernanke señaló que, aunque la creación de empleo en 2011 será mayor que este año, no será muy superior al incremento de la masa laboral, lo que implicará que la reducción de la tasa de desempleo será lenta. Además, alertó de que, en términos generales, un prolongada alto desempleo pondría en riesgo el gasto del consumidor y, por lo tanto, la sosteniblidad de la recuperación.