En rueda de prensa, Almudena Velázquez, abogada del servicio jurídico de Ausbanc, explicó que en rebajas, la forma más frecuente de fraude cosiste en el robo de la tarjeta, ya que los delincuentes aprovechan las aglomeraciones que se producen en estas fechas para sustraer a sus víctimas sus carteras de bolsillos y bolsos.
La segunda manera más frecuente de fraude es el cobro por duplicado de cargos por “negligencia o despiste”, en tanto que en tercer lugar se sitúan los “timos” en las compras on-line, mediante técnicas como el pharming o el phishing, con las que los “cibercacos” obtienen los datos bancarios del internauta para vaciar sus cuentas.
Ante la proliferación de este tipo de fraudes, la representante de Ausbanc reiteró la necesidad de establecer normas que regulen las medidas de seguridad mínimas exigibles en productos bancarios, tan sensibles y tan importantes como los medios de pago electrónicos.
Apuntó que durante el periodo de rebajas, en las que cada español se gastará una media de 120 euros, se incrementan considerablemente los pagos con tarjeta, lo que, a su vez, conlleva el aumento “exponencial” del fraude.
Velázquez recordó que las entidades financieras deben reintegrar “inmediata y automáticamente” los cargos indebidos realizados en las cuentas de los titulares de las tarjetas usadas fraudulentamente, de la misma forma que son responsables de su uso “ilegítimo” en las compras realizadas en Internet.