El Gobierno convoca la comisión de seguimiento de GM para sentarse “hasta que sea necesario”

ZARAGOZA, 10 (EUROPA PRESS)

El Ejecutivo central y el Gobierno de Aragón convocaron “con carácter de urgencia” a la Comisión de seguimiento de la negociación de la fábrica de General Motors (GM) España, ubicada en la localidad zaragozana de Figueruelas, para una reunión mañana, en la capital aragonesa, después de que la empresa decidiera hoy romper la negociación del convenio colectivo y retirar su propuesta para la reestructuración.

Según informó el consejero de Economía, Hacienda y Empleo del Gobierno de Aragón, Alberto Larraz, en declaraciones a los medios de comunicación en Zaragoza, se trata de una noticia “que nos agrada muy poco” y ante la que ambas partes “tienen que flexibilizar su postura”.

“Tanto el Gobierno central como el de Aragón hemos citado a la comisión de seguimiento para sentarnos y estar hasta que sea necesario, para sentarnos y llegar a un acuerdo. No es tiempo de desacuerdos y necesitamos todas las partes, la ciudadanía y la economía aragonesa, que se llegue a un acuerdo, que se sosieguen todos y vayamos a lo importante: el mercado, copar el mercado y vender coches y que sean noticia los nuevos modelos y no las negociaciones interminables, que llevamos ya excesivos meses”, aseveró.

En este sentido, avanzó que ya se ha citado a sindicatos y empresa a un encuentro en la sede del Departamento de Economía, en Zaragoza, para el que aún no se ha fijado la hora. “Y, a partir del momento que empecemos a trabajar y hasta que se llegue a un acuerdo, vamos a intentar no parar la negociación, no nos queda más remedio que tomar esta decisión y esperamos que lo acepten tanto sindicatos como empresa”, apuntó.

Además Larraz incidió en que “por supuesto” la Autoridad laboral “no va a aprobar ningún expediente de regulación de empleo si no hay acuerdo entre sindicatos y empresarios” de manera que “instamos a la negociación”.

Por parte del Ministerio de Industria acudirá la secretaria de Industria, Teresa Santero; del Ejecutivo aragonés, el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Alberto Larraz, y el consejero de Industria, Turismo y Comercio, Arturo Aliaga; de la empresa “los responsables de los detalles de la negociación para poder alcanzar acuerdos”; y de los sindicatos, “toda la comisión de seguimiento, para que estén representadas las máximas autoridades”.

POSICIONES NO ADECUADAS

Sobre la decisión de la empresa de retirar la propuesta de reestructuración, Larraz consideró que supone “retroceder la empresa posiciones que no son las adecuadas”. “De la misma manera que pedimos a los sindicatos un poco más de flexibilidad, no puede ahora la empresa retroceder cuatro pasos y decir que la responsabilidad la va a tener la Autoridad laboral”, aseveró.

En este sentido, Larraz repitió que “no aprobaremos los expedientes si no hay acuerdo, si bien vamos a procurar instar y trabajar las horas que sean necesarias para llegar a un acuerdo”. “Llamamos a la concordia, es tiempo de acuerdo y no podemos perder el tiempo”, afirmó.

El consejero Larraz explicó que el acuerdo “tiene que ser en todos los puntos” --reestructuración, convenio y plan de ahorro--. En referencia a la reestructuración recordó que están fundamentalmente incluidos los expedientes de regulación de empleo que suponen 900 ceses y 600 suspensiones. “A nosotros la línea que estaban siguiendo nos parecía bastante adecuada porque es poco dolosa para la empresa y bastante imaginativa, nos parecía bien pero, si la empresa da dos pasos atrás, nos parece un verdadero problema”, reconoció.

Sobre el convenio, recordó que los trabajadores habían propuesto una congelación salarial para 2009 y 2010. “Tenemos que trabajar en ello y ver qué volumen considera --la empresa-- ahorro, porque los trabajadores llevan ya 2009 y 2010 congelados y es una oferta que, complementada con alguna otra cosa, permite que se pueda llegar a acuerdo”, sostuvo.

Además Larraz añadió que “mañana vamos a tener que estar muchas horas”. “Hemos hablado con el presidente del Comité y después con Teresa Santero, que se ha puesto a buscar billetes para venir porque es necesario que tomemos la iniciativa nosotros, ya que la empresa y sindicatos llevan ya mucho tiempo y hay que alcanzar un acuerdo”, apuntó.

PERJUDICA IMAGEN DE MARCA

Por su parte, el consejero de Industria, Turismo y Comercio, Arturo Aliaga, dijo que romper la negociación supone una situación “grave” y que “estamos condenados a llegar a un acuerdo”. “En este momento, con un coche en el mercado y las dificultades del sector hay que llegar a un acuerdo, volver a la normalidad, tranquilizar a los trabajadores y a los mercados”, apuntó.

En este sentido advirtió de que “si se lanza un nuevo modelo y salen noticias todos los días de que en la planta están sin acuerdo, los propios consumidores que van a comprar el vehículo se lo piensan, así me lo han dicho a mi algunos concesionarios”.

“Hay que sentarse con bocadillos y hasta que haya acuerdos, es responsabilidad de todos, porque no son sólo los puestos de trabajo de GM, hay otros implicados. Urge que cerremos el proceso que perjudica incluso la imagen comercial de la marca”, concluyó.

La Dirección de la planta de General Motors (GM) España, ubicada en la localidad zaragozana de Figueruelas, rompió hoy las negociaciones con el Comité de Empresa para la negociación del convenio colectivo y retiró la propuesta de reestructuración para el despido de los 900 trabajadores.

Según informó el presidente del Comité, José Juan Arceiz, en declaraciones a Europa Press, la empresa considera que la congelación salarial de dos años “es muy poco dinero en relación a lo que hace falta para que el negocio sea rentable”.