González critica la falta una política “coordinada”

CÁDIZ, 8 (EUROPA PRESS)

El ex presidente del Gobierno Felipe González ha señalado que el “triunfo de la desregulación de los mercados”, la “mano invisible del mercado que se regula a sí misma” es la que ha provocado “la mayor catástrofe financiera de la historia” y ha advertido que “se está incubando la siguiente” porque “nadie pone freno a esto”. Considera que no se trata de un problema de soberanía, sino de que “no hay una decisión política coordinada para poner en orden esto”.

Durante la celebración en Cádiz del primero de los 'Diálogos sobre la libertad y el constitucionalismo en España', el público ha planteado a González el debate de si el liderazgo político nacional y europeo tiene que resignarse, no al Fondo Monetario Internacional (FMI), sino a los llamados mercados.

El ex presidente ha puntualizado que no se refiere al FMI porque “lo único que hay que pedirle es que sólo se equivoque una vez al año”, como sostiene que hacía antes con el informe anual. Según critica, ahora “siempre que habla se equivoca”, que es “cada 15 días”.

En este sentido, ha abundado que el hecho de que “no han acertado nunca lo sabemos porque nadie dijo nada de la que se nos venía nada con la implosión del sistema financiero”.

En su opinión, “quien manda son los que llamamos los mercados”, aquellos que el mes pasado comparecieron en Davos para, “después de sacarle la pasta a todo ciudadano de Europa y de Estados Unidos para rescatar de sus propios errores al sistema financiero internacional”, decir a los estados que “no se metan en reformarlos y que arreglen sus cuentas, que las tienen muy desequilibradas”, pero precisamente porque “ellos nos han metido en una crisis financiera que hemos tenido que rescatar, y además en una crisis económica y social de consecuencias enormes que ha endeudado a los países”.

Para Felipe González “los mercados están para ser gobernados por reglas claras y que se cumplan”, y ha insistido en la necesidad de una decisión política “coordinada” en este sentido para ponerles “orden” y evitar que se geste otra “catástrofe financiera”.