MADRID, 30 (EUROPA PRESS)
El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha asegurado que la convocatoria de una nueva huelga general dependerá de lo que haga el Gobierno en los próximos días, que serán, sin duda, “decisivos” para el país.
“Creo que el Gobierno debería aprender de sus errores”, ha señalado Méndez en declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Europa Press, tras asegurar que lo verdaderamente “lamentable” sería que cometiera nuevas equivocaciones, como elevar la edad de jubilación a los 67 años.
A su parecer, para evitar una nueva espiral de conflictividad y ante la falta de consenso en el Pacto de Toledo, el Gobierno debería reconstruir el consenso parlamentario renunciando a su propuesta y buscando una fórmula de acuerdo con los interlocutores. “Eso es lo que se debería hacer de aquí al 25 de enero”, ha añadido.
Los agentes sociales, por su parte, tendrán que hacer esfuerzos también para buscar acuerdos con el Gobierno sobre las pensiones y avanzar en la negociación colectiva con la patronal y, en definitiva, recuperar el diálogo y consenso social.
Según Méndez, de aquí al 10 de enero, habrá varias reuniones con el Gobierno en las que los sindicatos presentarán sus alternativas y esperan ver las propuestas del Gobierno por escrito, aunque el requisito para avanzar es que el Gobierno retire la “línea roja” que ha impuesto en la edad de jubilación.
Méndez ha reconocido tener una “gran preocupación” ante el “empecinamiento fruto de la desesperación” del Gobierno por elevar el límite legal a los 67 años. Sin embargo, ha admitido que siempre hay un “resquicio de esperanza”, ya que el Ejecutivo aún no ha puesto por escrito su propuesta.
Sobre las relaciones de UGT y el Gobierno, se ha limitado a decir que existe una discrepancia “muy profunda” en estos momentos, aunque ha considerado “muy importante” recomponer el diálogo social, lo que pasa por “reconsiderar” los errores cometidos y no caer en otros nuevos. “El Gobierno debería huir de la idea de que la política es sólo apariencia. Es fondo y apariencia”, ha subrayado.
En este sentido, ha considerado “muy decepcionante” el año 2010 por el “giro tan brusco y radical” que ha dado el Gobierno en sus políticas, con resultados “tan lamentables” en política económica, social y laboral y con algunas consecuencias directas, como la ruptura de la paz social y el debilitamiento del consenso del Pacto de Toledo. “Termina peor de lo que empezó”, ha indicado.
NEGOCIACIÓN COLECTIVA
Sobre la reforma de la negociación colectiva, una materia “importantísima”, Méndez ha dicho que el protagonismo de las reformas que han funcionado ha sido siempre de sindicatos y patronal. “Espero que el Gobierno no cometa errores”, ha dicho, tras asegurar que afirmar que habrá reforma con o sin consenso, como ya ha hecho hace el Ejecutivo, es ya “un error bastante importante”.
Preguntado los elementos que debe contener la reforma, ha considerado “absolutamente intolerable” la eliminación de la ultractividad, que sería, junto al incremento de la edad de jubilación, un motivo para que aumentara la conflictividad social. A su parecer, el Gobierno debería hacer una manifestación “clara y diáfana” sobre este tema.
VE A ROSELL “FIABLE Y LEAL”
En cuanto al cambio en la presidencia de la CEOE, Méndez ha valorado el proceso de elección democrático que se ha llevado a cabo en la patronal y ha considerado que el nuevo presidente, Juan Rosell, es un interlocutor “fiable y leal”, por lo que los sindicatos esperan un cambio respecto a una etapa que la propia patronal “quiere olvidar”.
Sobre si el jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, debería presentarse de nuevo o no a las elecciones generales, Méndez no ha querido emitir una opinión al respecto y se ha limitado a subrayar que el interés de UGT es que se produzca un cambio en la política económica del Gobierno. “Soy un lector de encuestas”, ha respondido al ser preguntado por si es pesimista en cuanto a las posibilidades del PSOE.