MADRID, 24 (EUROPA PRESS)
El coordinador económico del Partido Popular, Cristóbal Montoro, ha afirmado que España no es Grecia y que tiene una capacidad de respuesta “muy superior” al país heleno, aunque ha reconocido que ambos países tienen problemas en común, como la elevada deuda externa frente al resto del mundo.
“España no es Grecia, pero, ahora bien, sí tiene una serie de puntos comunes. El problema de Grecia es que tiene una deuda externa frente al resto del mundo muy elevada y a España le ocurre lo mismo, y esa deuda externa no tiene posibilidades de pagarse si no hay crecimiento económico”, ha reconocido.
En declaraciones a TVE recogidas por Europa Press, Montoro ha repetido su idea de que España es una rémora para el euro al alegar que el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, fue consciente de ello cuando en 2010 acometió los primeros ajustes.
No obstante, el diputado 'popular' ha negado que España haya estado “nunca” en riesgo de rescate, pero ha instado al Ejecutivo a explicar a la sociedad por qué hace las cosas, a la vez que se ha quejado de que se nos impongan los deberes desde fuera.
“A Francia no le ponen los deberes desde fuera ni a la misma Italia”, ha subrayado Montoro, para después asegurar que los países no deben acometer las reformas porque les convenga a los líderes europeos, sino por conveniencia propia.
EL PP NO PIDIÓ NADA A SAMARAS
Respecto a la reunión de su partido con la oposición griega, el 'popular' ha remarcado que ese encuentro se celebra todos los años, y ha dejado claro que el PP no pidió en ningún momento al líder de la oposición conservadora griega, Antonis Samaras, que acepte el plan de rescate del país heleno.
“Puede ser que tengan un plan de ajustes como nosotros, que tenemos nuestro programa de reformas”, ha señalado ante la negativa del partido conservador griego de aprobar el plan de rescate. Asimismo, ha asegurado que el programa del PP está levantando mucho interés entre los líderes europeos.
Preguntado por la negociación colectiva, Montoro cree que el PNV respaldó la medida del Gobierno a cambio de darle primacía a los convenios autonómicos frente a los nacionales o de empresa.
“Lo que no le conviene a España es un espectáculo, una negociación en el último minuto, un Gobierno con unos grupos nacionalistas a los que no les interesa la salida de la crisis, sino arrancar mayores concesiones”, ha concluido.