MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El presidente director general de Renault España, Jean-Pierre Laurent, advirtió este jueves de que la empresa tendrá que aplicar “posiblemente” un expediente de regulación de empleo (ERE) en su planta de carrocería-montaje de Valladolid en el último trimestre de 2010, como consecuencia de la previsible caída de la demanda.
Laurent, en una entrevista concedida a Europa Press, explicó que los modelos que se fabrican en Valladolid (Clio y Modus) se verán afectados en mayor medida que otros por el fin de las ayudas a la compra en España y otros países europeos, lo que provocará un descenso de la demanda y obligará previsiblemente a ajustar la producción.
Dado que Valladolid funciona actualmente con un único turno de fabricación, lo más probable es que la compañía se vea obligada a aplicar un ERE en el último trimestre del año. Por lo que respecta a la factoría Palencia, donde se fabrica el Mégane, el presidente de Renault España avanzó que la empresa intentará mantener el tercer turno (medio turno de noche).
PLAN INDUSTRIAL.
Por su parte, las plantas de motores de Valladolid y de cajas de cambios de Sevilla no se verán afectadas por el fin de las ayudas a la compra, dado que exportan la mayor parte de la producción a Nissan y a otras marcas participadas o controladas por Renault.
Laurent destacó que el plan industrial para Valladolid, que contempla la producción de un coche eléctrico, otro convencional y un motor, se mantendrá “si todo el mundo cumple sus compromisos”. Así, detalló que Renault debe reducir costes para mantener la competitividad, el Gobierno debe conceder las ayudas pactadas para los próximos años y los sindicatos tienen que respetar las medidas de flexibilidad pactadas.
NO CREE QUE SE RENUEVE EL 2000E.
El máximo responsable de Renault tiene “muy pocas esperanzas” de que el Gobierno renueve el Plan 2000E, toda vez que los esfuerzos del Ejecutivo se concentran en aumentar los ingresos y reducir el déficit. Por ello, estima que el mercado caerá un 20% mensual después del verano, para cerrar 2010 en un volumen similar al de 2009.
En este contexto, el objetivo de Renault en España es ganar cuota de mercado y hacerlo mediante ventas rentables, para lo que la empresa ha limitado sus entregas a los alquiladores. “No nos preocupa no ser líderes”, zanjó Jean-Pierre Laurent.