Las rebajas de verano, que comenzaron este lunes en el Archipiélago, preven grandes descuentos debido, entre otros motivos, a la cantidad de mercancías con las que cuentan los comercios por la bajada de las ventas durante este año y por la necesidad de liquidez que precisan los comerciantes.
Así lo manifestó este lunes a Efe el asesor jurídico de la Federación de Comercio de Tenerife (Fedeco), Carlos Ravelo, quién señaló que en lo que va de año las ventas han bajado un 30% en el Archipiélago, por lo que hay mucha mercancía acumulada que es preciso vender.
“Habrá verdaderas gangas” dijo el representante empresarial, quién señaló que esta acumulación de mercancías y la necesidad de liquidez es el motivo también por el que hay mayores descuentos que en otras temporadas.
Ravelo señaló que, de acuerdo con los datos de la Confederación Nacional de Comercio, el consumidor canario se gastará una media de 200 euros durante el período de rebajas, mientras que la Confederación Canaria del Comercio sitúa esta cifra en unos 80 euros.
Para el representante de Fedeco, la estimación de la confederación nacional es muy optimista y previsiblemente no se cumplirá, mientras que la previsión de los empresarios de la provincia de Las Palmas es muy baja, por lo que consideró que el gasto medio estará situado entre esas dos cantidades.
No obstante, Ravelo declaró que esta organización empresarial no es muy optimista ante la campaña de rebajas debido al “desbarajuste” que, en su opinión, se ha producido con el cambio de fechas en el inicio de las rebajas. En principio las rebajas estaba previsto que comenzaran el 12 de julio pero los empresarios pidieron su adelanto y el Gobierno de Canarias decidió que se iniciaran este lunes.
El representante de Fedeco afirmó que los pequeños y medianos comercios habían solicitado en invierno que las rebajas de verano comenzaran el 1 de julio, pero señaló que el Gobierno de Canarias atendió la petición de las grandes superficies para que se iniciaran más tarde.
El director general de Comercio, Arturo Cabrera, manifestó este lunes a Efe que en noviembre las siete comisiones insulares de comercio, formadas, entre otros por asociaciones empresariales y de consumidores, fijaron el 12 de julio como inicio de las rebajas, pero la semana pasada los empresarios pidieron su adelanto.
Cabrera recordó que las rebajas se prolongarán hasta el 6 de septiembre y señaló que las espectativas de venta son buenas, y confió en que al menos mantengan cifras similares a la campaña de verano del pasado año. Además destacó que se pueden producir importantes descuentos debido a la existencia de mucho material por la bajada de las ventas durante los meses de mayo y junio.
Recordó que durante los primeros meses del año las ventas se mantuvieron en unos niveles similares a los del año pasado y, a partir de abril, comenzó un descenso que aunque se produce todos los años durante esos meses, en este ejercicio se ha visto agravado por la situación económica.
Cabrera confió en que las rebajas tengan buenos resultados para el sector y animó a los consumidores a que aprovechen los descuentos para realizar las compras que precisen.
A la hora de apertura de los comercios, en una de las calles comerciales de la capital tinerfeña la tranquilidad era total aunque a medida que fueron pasando las horas se notaba mucho más afluencia de consumidores en las tiendas, en las que se ofrecían descuentos de hasta el 70%.
El presidente de la Confederación Canaria de Comercio (CONFECO), Orlando Cabrera, indicó que con la actual situación de crisis económica es difícil hacer previsiones sobre las ventas ya que el consumo se ha retraído y los ciudadanos se enfrentan a un aumento generalizado de precios y de los tipos de interés. A pesar de ello, los comerciantes confían en que las rebajas permitan vender el género que puede quedar obsoleto.
Por su parte, el secretario general de la Unión de Consumidores de Las Palmas, José Manuel Quesada, pidió que las fechas de las rebajas se adelanten lo antes posible y se tome como referencia otras comunidades autónomas como Madrid, donde la temporada de invierno, por ejemplo, comienza antes de la festividad de Reyes. A su juicio, el adelanto del inicio de las rebajas beneficia tanto a los consumidores, que compran a precios más baratos, como a los comerciantes, quienes pueden vender aquellos productos de temporada que quedan obsoletos, como el vestido y el calzado.
El representante de los consumidores destacó cómo muchos comercios se han adelantado a la fecha oficial de inicio de rebajas con campañas promocionales y ofertas que en la práctica suponen adelantarlas de forma encubierta, lo que, en su opinión, demuestra la necesidad de que comiencen antes.