MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
El secretario general de CC.OO., Ignacio Fernández Toxo, dio este martes a entender que CC.OO. no participará en el diálogo social tripartito hasta que sindicatos y empresarios lleguen a un acuerdo sobre negociación colectiva.
Toxo, que asistió a la presentación de un informe sobre el cambio de modelo productivo elaborado por la Fundación 1º de Mayo de CC.OO., subrayó que “sería conveniente” que sindicatos y patronal realizaran un “ejercicio de autonomía plena” y resolvieran la negociación colectiva antes de que se reanude el diálogo social a tres bandas (Gobierno, empresarios y sindicatos).
El dirigente sindical respondía así al ser preguntado por las declaraciones realizadas esta mañana por el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, asegurando que a él “le gustaría y que hará todo lo posible” para que el diálogo social tripartito pueda reabrirse antes de fin de año.
Toxo señaló al respecto que a los sindicatos también les gustaría poder sentarse a negociar, pero insistió en que antes debería quedar cerrado el tema de la negociación colectiva, una materia en la que, según dijo, “no pinta nada” el ministro Corbacho, pues ésta es una mesa de negociación de la que sólo forman parte empresarios y sindicatos.
En este punto, el secretario general de CC.OO. pidió a la CEOE que dé instrucciones a sus organizaciones asociadas para que desbloqueen los convenios colectivos que firmaron años atrás y que no están aplicando y para ultimar la negociación de los convenios nuevos.
Toxo recordó a la patronal española que la política de llegar a acuerdos depende de la “fiabilidad” de los interlocutores y declaró abiertamente que ahora mismo siente una “profunda desconfianza” de que se incumpla lo que pueda llegar a firmarse si a alguien “se le nubla el juicio”.
EL PARO SEGUIRÁ EVOLUCIONANDO “MAL”
El secretario general de CC.OO. también se refirió a los comentarios que ha realizado Corbacho sobre la evolución del paro. El titular de Trabajo ha advertido hoy de que los datos de octubre serán malos, pero ha confiado en que no lo sean tanto como los de igual mes de 2008, cuando el desempleo aumentó en casi 200.000 personas.
Toxo cree que las cifras del paro seguirán evolucionando “mal”, y añadió que “a él no le consuela” que puedan ser mejores que los de otros meses. “Los efectos del Plan-E están finalizando y si es cierto, como dice el Gobierno, que hay entre 300.000 y 400.000 empleos asociados al mismo no hace falta ser muy listo para saber lo que puede pasar”, subrayó.
Durante su intervención, el dirigente sindical se refirió al documento que ha elaborado su sindicato sobre el cambio del modelo productivo y en el que han participado diversos economistas, sociólogos y expertos medioambientales.
El sindicato establece en este documento cuatro grupos de sectores que deberían convivir en el nuevo modelo económico: los sectores básicos (construcción, automoción, turismo), que tendrían que ser sometidos a un proceso de modernización; los emergentes (energías renovables, alimentos procesados, agricultura ecológica, servicios sociosanitarios), que son los que “más impulso público” deberían recibir; los sectores apuesta de futuro (biomedicina y biocombustibles), y los sectores trasversales (I+D+i, educación y formación, TIC).
Toxo insistió en la necesidad de poner las herramientas y recursos necesarios para que la transformación del modelo económico sea una realidad, y recordó que, tal y como estaba configurando dicho modelo (apoyado en la mano de obra intensiva y en un tejido empresarial “poco innovador”), España también habría entrado en crisis aunque no se hubiera producido una deblacle en el sistema financiero.
TOPAR LA TEMPORALIDAD DE LAS PLANTILLAS
El hecho de que la temporalidad haya estado asociada a ese modelo supone, para CC.OO., que cualquier cambio en el mismo debería venir acompañado de medidas para acabar con la excesiva temporalidad en España, que alcanza a un tercio de la población trabajadora. En este sentido, Toxo no ocultó la necesidad de acometer cambios en el mercado laboral para erradicar los abusos que se cometen con los contratos temporales. “Ese es el objetivo”, enfatizó.
“Una economía que creaba seis de cada diez empleos de la UE en el pico del ciclo económico y que destruye seis de cada diez empleos de la UE en el valle del ciclo tiene un problema y tiene un problema serio, y ese problema tiene que ver con el modelo productivo y la falta de control sobre la temporalidad”, apuntó.
En este punto, Toxo dio algunas recetas para combatir la temporalidad en España. Además de reforzar la actuación de la Inspección de Trabajo, el dirigente sindical recordó que la reforma laboral de 1997 abrió la posibilidad de que, a través de la negociación colectiva, se topara el número de trabajadores temporales que podían tener las empresas en sus plantillas, algo muy parecido al acuerdo que han alcanzado Gobierno y sindicatos en la Administración Pública para limitar la temporalidad hasta un máximo del 8%.
Según denunció Toxo, esta posibilidad que se instauró con la reforma de 1997 ha sido poco utilizada a pesar de que se puede hacer vía negociación colectiva. También apuntó que debería aplicarse el límite al encadenamiento de contratos temporales que se impuso en la reforma laboral de 2006 y que deberían tomarse medidas ante la proliferación de contratos temporales asociados a contratas y subcontratas. “Es el momento de utilizar todos esos márgenes”, señaló.
Asimismo, el dirigente sindical se mostró partidario de “recuperar” la figura del contrato fijo-discontinuo frente a determinados contratos temporales, pues, aunque su uso ha sido “prácticamente abandonado”, podría ayudar a reducir la temporalidad. “Se puede hacer un aligeramiento de modalidades temporales, más en cuanto a su uso que en cuanto a figuras”, apostilló.