A través de un comunicado, Los Verdes de Tenerife han criticado la comparecencia del consejero de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias, Jorge Rodríguez, en comisión parlamentaria para tratar la instalación de una planta regasificadora en Arinaga.
El portavoz de la formación, Octavio Hernández, considera que Rodríguez “exagera el coste de la instalación para descartarla sin discusión empleando datos no contrastados”. Según Hernández “ni la regasificadora terrestre es tan barata, ni la propuesta mar adentro es tan cara como nos quieren hacer creer”. Además, según Los Verdes “hay fuentes de financiación adicionales que no se contemplan porque a Unelco-Endesa no le conviene”.
El consejero cifraba en 1.000 millones de euros el precio de la planta offshore, estimando esta cantidad inasumible por el Ministerio de Industria. Hernández indica que la regasificadora terrestre proyectada en Arinaga, idéntica a la prevista en Granadilla, “tendrá una capacidad de 150.000 metros cúbicos de gas natural y costará unos 160 millones de euros, pero debe incluirse la inversión necesaria para el dique portuario, en ingenierías, obra, hormigón y áridos, que ya está licitado en Granadilla con un coste de 130 millones de euros, de manera que el coste total se acercaría a los 300 millones de euros”.
Los Verdes adelantan además que “hay prevista una ampliación de ambas regasificadoras en el año 2017, duplicando la capacidad hasta 300.000 metros cúbicos cada una, de manera que la inversión total requerida por cada regasificadora podría rondar los 500 millones de euros cuando se amplíen dentro de 10 años”.
En cualquier caso, indica Hernández, “tanto las obras portuarias como la construcción de ambas centrales tienen una financiación de hasta el 50% con fondos europeos de desarrollo regional”.
Además, el 98% del gas natural sería empleado por Unelco-Endesa en las centrales de ciclo combinado y “la compañía eléctrica recibe compensaciones económicas para no repercutir en la tarifa los sobrecostes de la insularidad, así como ha estado percibiendo en Canarias vía tarifa hasta un 4% por la moratoria nuclear aunque no hay centrales nucleares en las islas”.
“El final de la moratoria nuclear ?señalan Los Verdes en su comunicado- significa que dejaremos de pagar por ese concepto ese 4% en el recibo de la luz. Consideramos que se puede alcanzar un acuerdo a través de la Secretaría de Estado para la Energía con el fin de que los sobrecostes de la adaptación de las infraestructuras eléctricas al medio ambiente del Archipiélago corran a cargo de ese porcentaje, manteniéndolo en una proporción razonable como concepto tarifario, sin necesidad de subir más de lo ya previsto el precio de la luz”. Los beneficios de Unelco-Endesa rondan los 700 millones de euros cada año.
El portavoz de Tenerife de Los Verdes señala que “existen casi una decena de sistemas offshore distintos, que el consejero no concreta, y tampoco existe planteada por Gascan una alternativa de estas características que permita calcular la inversión necesaria”.
Un barco regasificador (LNGRV) de 138.000 metros cúbicos, como los que ya hacen escala en el puerto de Santa Cruz ?detallan Los Verdes-, tiene un coste de 150 millones de euros -20,5 millones más que uno normal- y el puerto de enlace mar adentro “oscilaría entre 40 y 70 millones de euros, un coste muy inferior al que tendría ese dique en tierra, ya fuera en Arinaga o en Granadilla”.
Frente a la cifra de 1.000 millones de euros dada por el consejero, la planta offshore de Livorno, participada por Endesa, con un presupuesto de 400 millones de euros tendrá capacidad para 137.500 metros cúbicos, y la planta offshore del Norte del Adriático con una inversión de 900 millones de euros contará con una capacidad de 250.000 metros cúbicos.
Sin embargo, el coste de fabricación de estas regasificadoras “está afectado por la frecuencia de las operaciones y por la distancia de la costa, que debe ser salvada mediante un gasoducto”, a 20 kilómetros y con 110 metros de fondo la de Livorno y a 17 kilómetros y 30 metros de fondo la del Adriático.
En cambio, las regasificadoras previstas en Gran Canaria y Tenerife están condicionadas por el mantenimiento de una capacidad de reserva al ser territorios aislados de las redes continentales.
En este sentido, Hernández señaló que el negocio del gas natural en Canarias “no es sostenible dadas las altas tasas anuales de crecimiento de los precios de este combustible, ya que tiene unos costes añadidos de transporte y almacenamiento que hacen que el impacto de cualquier subida repercuta mucho más aquí que en Europa. Este sobrecoste supondrá para Unelco-Endesa mantener unos ingentes ingresos por compensaciones, como ha hecho hasta ahora empleando gasoil”.
Impacto turístico
Los Verdes se refirieron también a las declaraciones del consejero de Industria, que descartó situar la regasificadora mar adentro en Gran Canaria porque se ubicaría frente a una de las principales zonas turísticas de la isla.
Octavio Hernández se preguntó “cómo es posible que sea capaz de admitir ese argumento para oponerse a la offshore, cuando cumple la distancia de seguridad, y sin embargo defienda que se instale en Arinaga, donde la central no cumple la legislación porque estaría más cerca de zonas habitadas que si se pone a kilómetro y medio en el mar”.