El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, dijo este lunes a los sindicatos y a los empresarios que es “consciente” de los efectos “perversos” que la crisis financiera internacional está teniendo en el empleo y el ahorro, y se mostró dispuesto a adoptar más medidas para paliarlos.
Zapatero recibió en La Moncloa a los presidentes de CEOE y CEPYME, Gerardo Díaz Ferrán y Jesús Bárcenas, respectivamente, y a los secretarios generales de CCOO y UGT, José María Fidalgo y Cándido Méndez, con quienes preparó la cumbre del G-20 de Washington del próximo sábado.
Según informa el Gobierno en una nota, en la reunión, que duró algo más de dos horas, los representantes de los sindicatos trasladaron a Zapatero su inquietud porque la crisis repercuta en las condiciones de vida de los trabajadores y los ciudadanos en general.
En la entrevista, en la que también estuvo presente el vicepresidente económico, Pedro Solbes, el presidente del Gobierno destacó a los agentes sociales la “importancia” que tiene el hecho de que España participe en la cumbre del G-20.
El jefe del Ejecutivo, al igual que hizo esta mañana con los principales banqueros del país, intercambió impresiones con los interlocutores sociales sobre las “ideas y trabajos que nuestro país piensa plantear en la Cumbre”, y que no se concretan en la nota.
Los empresarios defendieron la necesidad de abordar reformas en el sistema financiero internacional para prevenir futuras crisis.
Según se precisa en el comunicado del Ministerio de la Presidencia, los empresarios creen que esas reformas fortalecerían la confianza de los inversores y de los propios emprendedores a la hora de “impulsar y protagonizar proyectos”.