El presidente de la federación nacional que agrupa a las pescaderías tradicionales, Fedepesca, Francisco Abad, defiende una reducción del IVA (del 10 % actual al 4 %) para las especies más demandadas por los españoles -merluza, sardina o boquerón-, porque son alimentos “de primera necesidad”.
Abad plantea, en una entrevista con Efe, que una bajada “selectiva” de ese impuesto, en el caso de los pescados más populares, impulsaría el consumo y sería una petición más aceptable para la Administración pública.
De esta forma, aboga por “dar una vuelta de tuerca” a la reivindicación del sector pesquero y acuícola, que desde hace años propone que el IVA de pescado y marisco (10 %) baje al nivel “superreducido” del 4 % -como el que se aplica a la leche, la fruta o al pan-.
Ante el rechazo del Gobierno a esta solicitud, cree conveniente volver a presentarla pero para “artículos principales, los que más compra el público y necesarios para la dieta”, que se considerarían “de primera necesidad”.
Entre ellos, cita la merluza, el pescado azul (como sardina o el boquerón) o el gallo, los “más consumidos, sobre todo por la gente mayor”.
“No puedes pretender que baje el IVA de los carabineros, de cigalas o de ostras, considerados de lujo (...); vamos a hacer una lista de los artículos más demandados y presentar una petición al Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente”, subraya.
La fiscalidad es uno de los asuntos en los que se centrará el Congreso sobre la Cadena de Valor Pesquero y Acuícola, que celebrará en Madrid el próximo lunes la Federación Nacional de Asociaciones Provinciales de Empresarios Detallistas de Pescados y Productos Congelados (Fedepesca).
El objetivo, según Abad, es buscar soluciones a la “preocupante” bajada del consumo de pescado.
La jornada reunirá a representantes de la Administración y de los segmentos vinculados a la producción, promoción y venta, con debates sobre innovación, sostenibilidad, comunicación o aspectos sociales.
A su juicio, el descenso del consumo se debe a que el ciudadano tiene poco tiempo, poco a poco va abandonando la rutina de ir a los mercados y compra los alimentos por otros canales.
No obstante, según Fedepesca, cuando un cliente acude a una pescadería tradicional compra un 25 % más de producto que cuando lo adquiere en grandes superficies.
Abad también recalca que ha hecho mucho “daño” la alarma en la opinión pública por el anisakis, pese a que “los pescaderos evisceran todo y si el pescado se congela, cocina y hierve correctamente no hay riesgo (...)”.
Por otra parte, el presidente de Fedepesca asegura que las pescaderías tradicionales se están reactivando y hay “relevo generacional”, ya que en estos establecimientos se ven ahora trabajadores más jóvenes que hace diez o 15 años.
Además, “hay empleo” y poco paro, porque formar un pescadero es “muy difícil” y el empresario que tiene un buen profesional “no lo suelta”.
En este sentido, recuerda que está muy avanzado el proyecto impulsado por la Secretaría General de Pesca para crear un titulación específica de la Universidad Nacional de Educación a Distancia para profesionales de las pescaderías.
Respecto a competencia de supermercados y grandes superficies, sí insiste en que el pescadero tradicional, “cada vez más cualificado”, está concienciándose de que tiene que cambiar en cuestiones como los horarios o en el uso de internet, para poder atender a esos ciudadanos ocupados que salen tarde de trabajar.