Panga, el pescado que mejor nada entre la polémica
Hace unos cuantos meses que uno de los pescados más consumidos en los hogares se ha convertido nuevamente en polémica. El panga, como así se llama, lo podemos encontrar tanto en pescaderías como congelado. Un pescado que ha ido ganando presencia en la alimentación diaria, debido a su bajo precio y a que se trata de filetes que no contienen espinas y de fácil preparación, sobre todo destinado a los más pequeños de la casa.
Mientras que por un lado determinadas cadenas de supermercados se han sumado a la iniciativa de carácter preventivo y han dejado de vender este producto, por otro, la Agencia Española de Consumo, Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aecosan) ha reiterado en ocasiones que los productos importados que se comercializan en España son inspeccionados por las autoridades sanitarias.
Conocida también como la merluza de bajo coste, la panga procede de países asiáticos como Vietnam, Indonesia, Tailandia o Bangladesh, tanto es así que la llegada de la crisis y el aumento de este pescado en los menús escolares dio lugar a que las importaciones españolas de panga procedente principalmente de Vietnam alcanzaran las 23.179 toneladas en el 2015, según datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. Un pescado que, pese a nadar en muy mala fama y tras ser conocedores de las condiciones en la que se cría, no ha parado de crecer su consumo en España, a diferencia del resto de países europeos donde ha disminuido.
En lo que respecta a Canarias, y como así nos enterábamos hace unos días, ninguno de los 469 comedores escolares del Archipiélago y pertenecientes a la Consejería de Educación y Universidades del Gobierno de Canarias incluye en su menú la panga.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) recomienda no recurrir a este pescado más de un vez por semana, debido a que un estudio sobre el mismo desveló que, de 23 muestras analizadas, en 4 se encontraron pequeñas cantidades de mercurio y aunque estas no superan el límite legal, consumido en exceso sí que podría ser significativo.
Para Eider García de Albeniz, dietista y nutricionista del Centro Onure, el bienestar y la salud dependen de la alimentación. Siempre desempeñando su vocación y profesión de cara al público, asesorando y compartiendo conocimientos en dietética y nutrición, hace referencia al pescado de temporada y a la alimentación que seguimos.
¿Se está distorsionando el tema de la panga? Ya sabemos la forma en la que se crían, pero realmente ¿qué propiedades podemos decir que tiene?
El argumento principal de los supermercados es la poca sostenibilidad de la cría de este pescado y el impacto medioambiental, parte de razón tienen, pero creemos que hay otros alimentos (ganadería) que generan más impacto medioambiental.
Por otro lado, a nivel nutricional es un alimento más bien pobre, de baja calidad proteica si lo comparamos con la merluza o la dorada (también pescados blancos). La panga ya de por sí pertenece a la familia de pescados blancos, que en comparación con los azules, cuentan con menos ácidos grasos omega 3. De todos modos, pertenece a los blancos, pero sale perdiendo en cuanto a nutrientes se refiere.
Si es un pescado que lleva multitud de años en el mercado, en tu opinión ¿cuál crees que es la razón por la que se ha creado ahora dicha polémica?
Creo que por todo lo que le rodea, como es el tipo de cría, la baja calidad nutricional, sus niveles contaminantes de mercurio (aunque el que se vende en España sí que cumple con la legislación vigente, y por lo tanto se considera seguro). Ahora porque tanto para bien como para mal, es el pescado que está de moda, sin embargo, existen otros muchos como la palometa, las sardinas, los boquerones, la lubina o las caballas que son tan asequibles como la panga.
¿Lo recomendarías como pescado?
Hay opciones nutricionalmente más válidas, sí que es verdad que su coste puede ser más alto que el de la panga, pero la dorada, la merluza o el gallo pueden ajustarse a los presupuestos familiares. Si bien un consumo ocasional de la panga tampoco lo descartaría, hay que tener en cuenta el nivel adquisitivo de la familia. Todo depende de la cantidad ingerida que se haga de este pescado y de la dieta alimenticia de cada persona, está claro que en cualquier alimento un uso excesivo puede resultar perjudicial.
¿Seguimos un buen patrón alimenticio? ¿Cuáles son los principales errores en los que caemos a la hora de alimentarnos?
No. El consumo de alimentos de origen vegetal, como son las frutas y verduras, sigue siendo bajo. Además, tiramos de muchos alimentos procesados y bajo valor nutricional (ricos en azúcares, sal y grasas no saludables). Sin darnos cuenta, no valoramos que la fruta o las verduras no tienen por qué comerse tal cual, existen muchos tipos de preparación que hacen que estos alimentos sean más atractivos y llamativos una vez lleguen a plato.
¿Estamos a la cola en buena alimentación?
Ahí andamos. El índice de sobrepeso y obesidad en adultos es de la mitad de la población, un 50%. Y en cuanto a sobrepeso/obesidad infantil, dentro de los cinco primeros, a nivel mundial, con más de un 40% de la población infantil.
Lo cierto es que no somos un ejemplo a seguir, esto es una realidad que nos viene persiguiendo desde hace bastantes años. El ritmo de vida que llevamos, el estrés, las prisas y la comida rápida han tenido una clara implicación en la obesidad. Cuando recurrimos cada día a la hora de la comida a por un menú de cinco euros formado por una hamburguesa, refresco y poco más, por muy rico que nos parezca, en nuestro organismo no tiene el mismo resultado. La comodidad y la rapidez en la alimentación, puede traer graves consecuencias.
Existe la creencia en parte de la población que aunque no se coma correctamente si se hace deporte, esto lo soluciona ¿Qué piensas al respecto?
Que están equivocados. El ejercicio es muy importante, es un complemento y no podemos olvidar que otro pilar fundamental dentro de nuestro estilo de vida, tanto en adultos como en jóvenes. En este caso, la alimentación representa el 60% y el ejercicio, un 40%. Tampoco podemos olvidar que el descanso es muy importante y repercute de forma muy considerable en las actividades que desempeñamos cada día, así como en nuestra felicidad, ánimo y motivación.
Siguiendo unas pautas, ¿cuál sería la dieta alimenticia perfecta?
Como te decía, basar nuestra alimentación en alimentos de origen vegetal, fundamentalmente consumo diario de 5 raciones de fruta y verdura diarias (en total, 2 raciones de verdura y 3 piezas de fruta), granos integrales, legumbres, frutos secos y un consumo moderado de carnes (reduciendo a una o dos veces/semana como máximo el consumo de carne roja), aumentando el consumo de pescado tanto blanco, como azul y cocinar con aceite de oliva virgen extra, esa sería la dieta perfecta.
Cada uno luego tiene sus gustos y preferencias, además de alergias e intolerancias, pero hay que tratar de hacer un esfuerzo por seguir una alimentación equilibrada, que ¡ojo! ello no quiere decir que de vez en cuando no podamos darnos un capricho, pues todo en su justa medida es necesario.