Los estudios cardiológicos de un enfermero herreño

Quedamos en el lugar en el cual desarrolla cada día su trabajo. Hablar con él, supone hacer referencia a multitud de investigaciones, publicaciones, conferencias o congresos, y todo ello vinculado siempre a la cardiología. Javier García es enfermero del Área de Salud en El Hierro y compagina su profesión con estudios sobre electrocardiogramas, centrándose en los últimos años en núcleos familiares de la isla que padecen el llamado síndrome de Bayés, patología que se caracteriza por la presencia de arritmias, que de no tratarse a tiempo, podrían ocasionar embolias.

Nada más comenzar a hablar con Javier, es fácil detectar que no le gusta alardear de sus distinciones, aunque lo cierto es que cuenta con varias, como Primer premio a la mejor comunicación en las Jornadas sobre Innovaciones en Enfermería en el 2004 o el de Maestro del Foro Iberoamericano de Arritmias en Internet por la Sociedad Interamericana de Cardiología, obtenido en el 2016.

Varios aspectos han influido para que desde hace 20 años decidiera comenzar a indagar en este campo, uno de ellos, el haber acompañado siempre desde muy pequeño a sus abuelos al cardiólogo, algo que le permitió estar en contacto con esta rama desde una temprana edad y el otro llegó, una vez que comenzó sus estudios en enfermería, pues le llamó la atención los electrocardiogramas y el poder entender “esas cuatro rayas, ya que veía a compañeros que hablaban de ello con gran naturalidad y muy desenvueltos, esto me animó a interesarme en el tema”, como así él mismo destaca.

– Terminaste la carrera de enfermería y posteriormente comenzaste a interesarte por la cardiología. ¿Cómo se desarrolló esa idea e iniciativa de llevar a cabo estudios relacionados en este ámbito?

– En el año 98 empecé a interesarme por todo lo vinculado a los electros, vas aprendiendo cada día más por lo que ves, lees y escuchas. Aquí en El Hierro, estoy desde el 2001 de forma permanente y vas observando casos concretos y obteniendo como digo yo, un libro muy grande en la cabeza. Por esta razón, para algunos estudios he tomado como muestra personas de la isla, pues tratas con ellas cada día, sabes lo que padecen.

“En el año 98 empecé a interesarme por todo lo vinculado a los electros, vas aprendiendo cada día más por lo que ves, lees y escuchas”, resalta García

En concreto, unas de las últimas investigaciones y que aún se continúa mirando, es el Síndrome de Bayés, que tiene mucha vinculación con la fibrilación auricular que es la arritmia más común, se suele dar a partir de los 65 años y estos pacientes se encuentran, por lo general, anticoagulados con Sintrom. Es una arritmia que aparece con la edad, fruto de un envejecimiento del corazón.

Lo que se ha comprobado es una genética parecida a la que produce dicha fibrilación y se ha detectado en los pocos casos estudiados. Hay unos resultados preeliminares y un pequeño trabajo que se presentará en un congreso, me refiero a la relación existente entre el Síndrome de Bayés y los canales de sodio.

“…Es primordial una buena calidad del registro del electrocardiograma, eso significa preparar bien al paciente”

– ¿Qué crea la curiosidad en ti para centrarte justamente en todo esto y que además algunos de los casos estudiados sean a partir de núcleos familiares de El Hierro?

– La persona a la que sigo y me ha impulsado es el profesor Bayés de Luna, es uno de los principales majaderos en este tema (ríe). Entonces siempre los casos que he visto, los he seguido. De hecho, hasta hace muy poco este Síndrome no tenía ni apellido, pero lo que yo hacía era reunir los casos que atendía en la consulta, los guardaba y los consultaba con este profesor. Después en todo ello, apareció otro investigador que está en Canadá, Adrián Baranchuk, que ha sido quien le ha puesto nombre.

Durante dos años se han presentado en El Hierro casos aislados, yo se los mandaba al profesor Bayés y hace poco los vimos precisamente en núcleos familiares, donde lo tenía el padre y varios de los hijos, eso nos hizo pensar en el posible origen genético que podría tener. En concreto, en tres familias de la isla, quizás aquí habrá alguna más, pero hemos empezado con esta muestra que coincide con lo que es el Síndrome de Bayés, es decir, que predomina en personas con una edad avanzada.

¿De qué nos sirve esto? pues para en un futuro, por ejemplo, poder hacer prevención primaria en los individuos susceptibles más jóvenes y tenerlos más estrechamente vigilados e incluso poder anticoagularlos antes de que les pueda dar un ictus. Hablamos de un estado que lo tienes, cuando el patrón aparece en el electrocardiograma.

Como mencioné con anterioridad, lo interesante de esto son las ventajas que puede tener un paciente de cara al futuro, desde el punto de vista preventivo, al realizarse revisiones para mantenerlo controlado.

En una investigación hay que esperar para ver que pasa y esa es la fase en la cual me encuentro, por si hay que aumentar la muestra o por el contrario, se queda tal y como está.

Quisiera también destacar que han habido momentos en los que los casos no los he podido coger de aquí, al no haber pacientes con unas determinadas características, por lo que me he tenido que servir de fuera.

Ha obtenido diversas distinciones como ‘Primer premio a la mejor comunicación en las Jornadas sobre Innovaciones en Enfermería’

– En los años que has dedicado a la formación en este campo ¿Qué es lo más que te ha llamado la atención?

– Mi trabajo inicial ha estado basado en la electrocardiografía, es primordial una buena calidad del registro del electrocardiograma, eso significa preparar bien al paciente para poder hacerlo, colocar los electrodos en el lugar que está establecido y aplicar los parámetros técnicos necesarios que no alteren la señal del electro. Esto es importante, para no obtener unos resultados disparatados y alejados de la realidad. Por ponerte un ejemplo, en un Congreso Internacional presentamos un trabajo sobre como diferenciar los electrocardiogramas de los pacientes que tienen Síndrome de Brugada que es una enfermedad que produce muerte súbita, de otro grupo de pacientes que no padecían mencionado Síndrome, pero los electrodos mal colocados dieron como resultado que sí tenían tal Síndrome. De ahí la importancia de colocar bien todo en su lugar.

Así es que, ese es mi punto fuerte y luego hago labores de apoyo, como el que hemos tratado durante la entrevista, no solo en el Síndrome de Bayés, si no en otros casos clínicos.