El Gobierno canario avala los cambios que Red Eléctrica de España (REE) ha hecho al proyecto de la central hidráulica Chira-Soria para que, a partir de 2022, cuando podría comenzar a operar, garantice el suministro, la seguridad del sistema y la integración de energías renovables.
Así lo ha asegurado el consejero canario de Economía, Industria, Comercio y Conocimiento, Pedro Ortega, tras reunirse este jueves con el consejero delegado de REE, Juan Lasala, quien le ha presentado las mejoras sociales y ambientales que se han introducido al proyecto, inicialmente previsto exclusivamente para la generación eléctrica.
Lasala ha informado que las obras de Chira-Soria podrían comenzar a principios de 2017, mientras que el consejero ha recordado que el plazo de ejecución es de cinco años.
Ortega ha explicado que las modificaciones introducidas a Chira-Soria son consecuencia de su adaptación a la ley 17/2013, por la que se tienen que cumplir tres premisas: la garantía de suministro, la seguridad del sistema y la integración de las energías renovables no gestionables.
Además de manifestar el “apoyo” y la “bendición” de la Consejería que dirige a este nuevo proyecto, Ortega ha resaltado las mejoras sociales que incorpora y que beneficiarán al entorno donde se construirá.
Entre esas mejoras, Lasala ha aludido a la decisión de soterrar algunas estructuras inicialmente previstas en superficie y a la construcción de un carril bici que va a conectar con Las Filipinas.
El consejero delegado de REE ha recordado que este proyecto supondrá una inversión cercana a los 300 millones de euros, si bien ha destacado que su incremento respecto a la prevista en el elaborado por Endesa con distinto fin “va a costarle menos al sistema y a los ciudadanos”.
“La rentabilidad que REE está exigiendo al proyecto es menor que la que se le exigía anteriormente”, ha afirmado Lasala, quien ha añadido que esto se traducirá en ahorros para el ciudadano, “que va a percibir que se van a integrar cada vez más energías renovables, que van a sustituir a energías más caras y más sucias, como el fuel”.
Sobre las modificaciones técnicas que se han introducido a este proyecto, Lasala ha explicado que el inicial “no era excesivamente modular, ya que, por ejemplo, tenía tres turbinas que se han incrementado a seis porque es mucho más fácil integrar energías renovables poco a poco”.
“Si tengo una necesidad de integrar 25 megavatios renovables y tengo que arrancar de golpe una bomba de 60, necesito otra generación para que la bomba funcione. Si tengo turbinas más pequeñas puedo adaptar la renovable de una manera más sencilla y evitar costes de otro tipo de generación”, ha referido el consejero delegado de REE.