Una de las líneas rojas que mantenía Ciudadanos para apoyar la investidura del actual presidente en funciones, Mariano Rajoy, era que se salvaguardara la “unidad de España”. En el mes de julio, anunciaban que los partidos con carácter nacionalista quedaban vetados de cara a un posible entendimiento, pero días antes del último debate de investidura, Coalición Canaria (CC) cerraba un acuerdo con el Partido Popular (PP) con el fin de brindarles su apoyo y que pasaba por la aprobación de 14 puntos. Ante ello, el diputado de la formación naranja por la provincia de Las Palmas, Saúl Ramírez, asegura que no le incomoda el nacionalismo de este partido, ya que no pide la independencia para el Archipiélago.
“Yo no llamaría a Coalición Canaria partido nacionalista”, asegura Ramírez. Y es que, considera que no sólo no pide la independencia, sino que tampoco exige privilegios, sino derechos “justos” para Canarias. En este sentido, señala que su formación recogía en su programa electoral hasta cincuenta puntos para las Islas y que los que ha ratificado el partido de Ana Oramas (CC) con los populares ya aparecían reflejados en él, por lo que le parecen “defendibles”.
Para Ramírez, CC es un partido que actúa como “bisagra” en los momentos de las elecciones y que “no es la deriva que tiene, por ejemplo, la antigua Convergencia” , pues, a su juicio, este partido “es el mayor problema que va a afrontar la unidad del Estado a corto plazo, porque, tiene una hoja de ruta para que en 2017 se produzca la unilateral secesión de Cataluña del territorio español”, asegura. Por este motivo, insiste en que este escenario “no es comparable” al que representan fuerzas como Coalición Canaria o Nueva Canarias (NC).
El diputado de Ciudadanos cree que el acuerdo entre PP y CC ha sido “insuficiente” y “poco ambicioso”. Señala que un partido nacionalista como Coalición Canaria, con poca representación en el Congreso, no tiene “peso” para defender en voz alta las singularidades del Archipiélago e indica que es su formación la que va a “elevar” la voz para defender los derechos de los canarios.
La diputada de Ciudadanos por la provincia de Santa Cruz de Tenerife, Melisa Rodríguez, también se manifestaba sobre este asunto antes de que se ratificara el acuerdo y opinaba que la incorporación de Coalición Canaria (CC) al pacto sería posible si esta formación dejaba de lado “su parte más nacionalista” y si se declaraba a favor de la unidad de España. Y es que, para la política de la formación naranja, este partido canario se mueve en “la ambigüedad” en sus posicionamientos nacionalistas.
“Canarias ha sido maltratada en los últimos cuatro años”
Saúl Ramírez coincide con el diputado de Nueva Canarias, Pedro Quevedo, cuando defendía este miércoles en el Congreso que las Islas han sido “maltratadas” en los últimos años por el PP. El diputado de Ciudadanos apunta que no se han cumplido los compromisos con el Archipiélago, en tanto que se han suprimido planes de empleo, es la región que tiene el nivel más bajo de inversión o que se han eliminado partidas para infraestructuras. Además, matiza que este “maltrato” viene “de antes” y que también ha contribuido a ello el PSOE.
El político de la formación naranja recuerda que Canarias es la única comunidad del estado español calificada como ultraperiférica y que, por tanto, “requiere realmente de una situación especial para igualarse al resto del estado y no como privilegio”. Y es que, según indica, Ciudadanos está en contra de que unas comunidades tengan “privilegios” frente a otras, pero está de acuerdo en que tengan los mismos derechos.
Ciudadanos insiste en que el acuerdo con el PP es “de investidura”
El diputado por Las Palmas puntualiza que su partido ha dejado claro que ha ratificado un acuerdo “de investidura”, aunque el “PP ha pasado de puntillas por eso”. El próximo lunes, después del segundo debate de investidura de este viernes, la ejecutiva de Ciudadanos se reunirá para tomar las nuevas directrices.
Su deseo es que el próximo viernes el PSOE se abstenga y explica que echó de menos que Rajoy no pidiera esto abiertamente al secretario general de los socialistas en su discurso, el cual le “decepcionó bastante” ya que “no buscó el apoyo de la cámara” y fue “bastante plano”.
Tras este intento del actual presidente en funciones, señala que se deben abrir nuevas vías de diálogos con todos los partidos, aunque matiza que con Podemos no podrían llegar a un acuerdo de gobierno. Al igual que el líder de la formación naranja, Albert Rivera, opina que PP y PSOE tienen muchos puntos en común y que “es el momento de buscar lo que les une y no lo que les separa”. La clave está en “dejar los personalismos a un lado”, apunta.