La Universidad de La Laguna ha elaborado un estudio comparativo de los informes de la Dirección General de Sostenibilidad de la Costa y el Mar sobre los proyectos de hidrocarburos de Canarias, Valencia y Alborán, en el que se concluye que en el caso de Canarias, “la inexistencia de una evaluación adecuada o apropiada de los efectos ambientales sobre las especies protegidas del área hace necesaria, al igual que en los casos paralelos estudiados, la actuación preventiva de la Administración para evitar las perturbaciones y daños a las especies protegidas por unos impactos que no han sido suficiente y correctamente valorados y corregidos”.
Según informa el Cabildo de Fuerteventura, este informe presenta información técnica que evidencia el distinto tratamiento que el Ministerio realiza, en el mismo año 2014, de la evaluación de riesgos ambientales de los proyectos de hidrocarburos de Canarias (Repsol), Valencia (Capricorn Spain Limited) y el Mar de Alborán (CNWL Oil).
La Declaración de Impacto Ambiental (DIA) de Alborán (proyecto Chinook de CNWL Oil en Málaga y Granada), y el informe de la Dirección General del Golfo de Valencia (proyecto de Capricorn) concluyen que los impactos ambientales de la contaminación acústica originada por la prospección sísmica son negativos y se aconseja la no realización de la sísmica. En contraste, la DIA del proyecto de Canarias (Repsol) concluye que no hay impactos significativos.
“Pero recalcamos que esto se base en información incompleta e incorrecta, por lo que no se están aplicando medidas correctoras suficientes, y por ello el potencial efecto sobre la fauna marina es alto. Esto es importante porque los valores de biodiversidad marina en Canarias superan, en cuanto a cetáceos y tortugas, a los de las zonas de Alborán y el Golfo de Valencia, donde se han detenido los proyectos por su posible impacto en estos animales”, se advierte por el equipo redactor.
Los argumentos para desaconsejar la realización de las actividades en Alborán y Golfo de Valencia se basan en el posible impacto a fauna protegida. Se cita en Alborán la presencia de nueve especies de cetáceos con carácter regular, más cuatro especies ocasionales; en el Golfo de Valencia se citan ocho especies de cetáceos, dos de ellas presentes todo el año (delfines mular y listado).
En contraste, Canarias alberga 30 especies de cetáceos, 28 de ellas citadas en el Este de Fuerteventura y Lanzarote, de las que al menos once están todo el año: calderón de aleta corta, calderón gris, cachalote, zifios de Cuvier, Blainville y Gervais, delfines común, moteado, mular y listado, y rorcual tropical. Además, Canarias es el único lugar de España donde se conoce la presencia del rorcual tropical todo el año, y coinciden poblaciones todo el año de seis especies protegidas de cetáceos de buceo profundo: el calderón de aleta corta, el cachalote, el calderón gris y tres especies de zifios.
Así mismo, los expertos aseguran que las aguas entre Canarias y África son un importante corredor migratorio para los cetáceos, incluyendo todas las especies de rorcuales del Atlántico Norte. Además, Los zifios han probado ser especialmente sensibles a la contaminación acústica, y los rorcuales han reaccionado con evitación, a distancias de más de 200 km, ante sistemas sísmicos similares al que utiliza Repsol en Canarias. Así, se evidencia que Canarias presenta la mayor biodiversidad de cetáceos de las tres áreas comparadas, así como un mayor número de especies de cetáceos presentes durante todo el año.
Además de los cetáceos, la Dirección General resalta la importancia en Alborán y Golfo de Valencia de las tortugas marinas, citándose cuatro especies en estos lugares. Canarias también supera a estas áreas en biodiversidad de tortugas marinas, con seis especies citadas en el Archipiélago, que es un área de gran importancia para los juveniles de la amenazada tortuga boba. Es tanta la importancia de Canarias para esta especie que en Fuerteventura existe un programa permanente de cría en cautividad y suelta de tortugas.
Otros valores ambientales de Canarias son las comunidades marinas de los fondos profundos en el área de los domos salinos prospectada por Repsol: corales de vida libre y otros invertebrados suspensívoros y filtradores de los fondos detríticos, comunidades de gorgonias y corales blancos en los afloramientos rocosos, etc. Además, en el área vecina a las perforaciones hay numerosos espacios protegidos por sus valores biológicos y geológicos.
En Alborán y Golfo de Valencia los informes negativos conciernen a la primera fase del proyecto de hidrocarburos: la prospección sísmica, cuyo mayor impacto es la contaminación acústica. Esta fase se realizó en Canarias en 2003 y originó un proceso judicial que culminó en la retirada del permiso de prospección a RIPSA en 2004, durante diez años, por incumplir normativa ambiental. Sin embargo, la prospección sísmica ya se había consumado cuando se retiró el permiso, porque no se procedió a una detención cautelar de las actividades durante el proceso judicial. Dado que no se realizó un seguimiento ambiental, se desconocen los posibles daños a la fauna marina o a la pesca que pudo causar la actividad sísmica en Canarias.
En Canarias la DIA declara un impacto favorable a la perforación de tres pozos exploratorios. Esta actividad produce contaminación acústica (ruidos derivados de la plataforma de perforación y buques auxiliares, de la perforación, y de la caracterización del fondo y el subsuelo mediante el uso de sonar de barrido lateral, perfilador de subsuelo y perfilador acústico vertical VSP) y química (lodos de perforación, movilización de contaminantes del subsuelo), además de suponer un riesgo de vertido accidental. Debe destacarse que el pozo más profundo autorizado es “HPHT” (alta presión y alta temperatura: pozo Zanahoria, llega a 6800 metros de profundidad en el subsuelo) y se considera por tanto de alto riesgo.
Este minucioso estudio ha sido elaborado por la Dra. Natacha Aguilar de Soto, (Investigadora y profesora de la Universidad de La Laguna), con la opinión experta del Dr. Manuel Castellote (Investigador de la NOAA, EEUU) y del Catedrático Alberto Brito (Director del Grupo de Investigación en Biodiversidad, Ecología Marina y Conservación de la Universidad de La Laguna).
Cañones de sonido
En un proyecto de sísmica científica en Baleares en 2014 (SIMBAD-2, Geosciences Environment Toulouse) el Ministerio no autorizó el uso de un solo cañón de aire comprimido de baja presión, por no haber sido sometido a Evaluación de Impacto Ambiental.
En el caso de Canarias, Repsol utiliza un perfilador sísmico (VSP), con hasta cuatro cañones de aire comprimido, que no fue sometido a una evaluación ambiental adecuada, y que el centro de modelización del Gobierno, CEDEX, tampoco puede evaluar adecuadamente, por tener información incorrecta e incompleta desde Repsol.
El uso de un solo cañón de bajo volumen, que constituye un nivel de fuente inferior al de Repsol en Canarias, fue denegado por el riesgo que conlleva su uso sin estudio de impacto previo para la fauna marina, demostrando que la operación de Repsol constituye en efecto un riesgo para la fauna marina que debe considerarse seriamente. Es destacable la referencia científica de que un sistema similar al de Repsol generó respuestas de cambio de rutas por rorcuales en el Mediterráneo hasta más de 200 km de la fuente de emisión.