El secretario general de Coalición Canaria (CC), José Miguel Barragán, ha pedido a Repsol que certifique su marcha definitiva del Archipiélago canario y comunique al Ministerio de Industria su decisión de que renuncia a las prospecciones petrolíferas autorizadas por el Gobierno del Estado.
En este sentido, la diputada Ana Oramas y el senador Narvay Quintero han registrado diferentes iniciativas parlamentarias en las que preguntan si es cierto que la autorización concedida a Repsol les permite poder volver a perforar a Canarias durante un periodo de tres años.
También piden que Industria aclare si pretende revocar dicha autorización, si Repsol ha comunicado oficialmente su marcha de las islas y si la multinacional ha solicitado algún tipo de prórroga o modificación en la autorización que posee.
Barragán en un comunicado considera que “la precipitada” salida de Repsol puede ser consecuencia de la actual coyuntura del mercado internacional del petróleo, marcada por la fuerte caída del precio del barril de crudo, y la decisión de muchas compañías de paralizar sus proyectos de prospecciones debido a su elevado coste económico y a la competencia que ahora se abre con el fracking.
El dirigente nacionalista no descarta que este anuncio es un pacto entre el PP y Repsol para que el asunto del petróleo no esté presente en la campaña electoral y mejorar así “la mala imagen del PP en las elecciones locales y autonómicas de mayo de 2015”.
El secretario general de CC insta a la multinacional que comunique oficialmente que desiste de volver a operar en Canarias “para que no existan dudas sobre si su marcha obedece a un simple aplazamiento, teniendo en cuenta que este tipo de proyectos se han vuelto arriesgados e inviables, desde un punto de vista económico, al bajar el precio del crudo”.
Para CC, la cancelación definitiva de las prospecciones petrolíferas sería “la mejor noticia para la economía canaria ya que, en el caso de que sea así, se disiparía la amenaza que supondría vivir bajo el constante peligro de un posible vertido y sus riesgos para el ecosistema de las islas”.