NUEVA YORK, 21 (EUROPA PRESS)
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha criticado el hecho de que en los países occidentales se esté hablando tanto del caso de la iraní Sakineh Mohamadi Ashtiani, cuya sentencia a morir lapidada por adulterio, recordó, aún no es definitiva, cuando en las cárceles de Estados Unidos hay 53 mujeres esperando a ser ejecutadas.
“Ahora mismo hay 53 mujeres en el corredor de la muerte en Estados Unidos, mientras que en Irán la sentencia de la señorita Mohamadi aún no ha concluido. Sin embargo, (Occidente) ha hecho un despliegue mediático anti iraní”, declaró este lunes por la noche en Nueva York, donde participa en la reunión de la ONU sobre los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Varios medios de comunicación se han referido recientemente al caso de la estadounidense Teresa Lewis, que ha confesado que contrató a dos hombres para que asesinasen en 2002 a su marido y a su hijastro y poder cobrar así un seguro de vida.
A menos que el Tribunal Supremo intervenga, Lewis se convertirá este jueves en la primera mujer en ser ejecutada por el estado de Virginia desde hace casi cien años, pese a que los partidarios de la abolición de la pena de muerte han advertido de que tiene sus facultades mentales disminuidas y que los dos sicarios se han aprovechado de ella.
“Desgraciadamente, el lema de la guerra contra el terrorismo se ha traducido en una guerra contra los países musulmanes”, denunció Ahmadineyad en un encuentro con personalidades y eruditos musulmanes, según informa la agencia de noticias oficial iraní IRNA.
En este contexto, el presidente de la República Islámica criticó a la OTAN por matar a afganos inocentes en una guerra que, dijo, se inició con la excusa de encontrar a “unos pocos que se supone eran responsables” de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.
“Según una estimación oficial, en el incidente del 11-S murieron 3.000 personas, pero en Afganistán han muerto hasta ahora al menos 110.000 personas, y no se puede saber durante cuánto tiempo seguirá la matanza”, añadió. “En realidad, no se están vengando de los terroristas, se están vengando de los musulmanes”, concluyó.