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Amnistía Internacional desconfía de que China permita la salida de Chen Guangcheng

MADRID, 4 (EUROPA PRESS)

La ONG Amnistía Internacional ha mostrado su desconfianza ante una posible salida de China del disidente Chen Guangcheng, después de que el Gobierno haya prometido que estudiará concederle un permiso de salida para estudiar en el extranjero.

Después de que Washington confirmase la concesión de una beca para Chen en una universidad norteamericana, el Ministerio chino de Asuntos Exteriores aseguró que el disidente tiene derecho a “estudiar en el extranjero” si lo solicita a través de los “cauces ordinarios” y de “acuerdo con la ley, de la misma forma que cualquier otro ciudadano chino”.

Amnistía ha advertido en un comunicado de las promesas “vacías” de Pekín, ya que las autoridades del país asiático siguen presionando a familiares y simpatizantes de Chen, un invidente de 40 años de edad que se refugió en la Embajada estadounidense. Lo hizo después de conseguir escapar del arresto domiciliario en el que se encontraba desde septiembre de 2010 por denunciar las prácticas ilegales de las autoridades regionales en el marco de la política del hijo único.

“La disparidad entre las declaraciones y la realidad sobre el terreno es evidente”, ha lamentado la subdirectora de la ONG para la región de Asia-Pacífico, Catherine Baber. En este sentido, ha denunciado el acoso que siguen sufriendo personas del entorno de Chen y ha citado como ejemplo la paliza recibida por el abogado Jiang Tianyong, que trató de visitar al opositor en un hospital de Pekín.

Para Baber, “el futuro de Chen y su familia esta lejos de aclararse, dado que todavía no están a salvo y libres”. La representante de Amnistía ha pedido al Gobierno de Estados Unidos que revele “exactamente” las promesas de las autoridades chinas, que hasta ahora han demostrado “una y otra vez” no respetar la seguridad y libertad del disidente.

“Durante más de siete años, este hombre ha estado bajo arresto domiciliario o en prisión sin otro motivo que intentar utilizar la ley para proteger la legalidad y los Derechos Humanos”, ha añadido Baber.