La segunda jornada de levantamiento popular en el Sáhara Occidental se ha saldado al caer la noche de este martes con un intento frustrado por parte de jóvenes saharauis de protesta ante el símbolo de la represión marroquí en el territorio ocupado: la Cárcel Negra de El Aaiún.
Según informaciones recabadas por activistas en contacto telefónico con la capital de la excolonia española, recogidas por CANARIAS AHORA a través de blogs, “el ataque a la Cárcel Negra de El Aaiún no ha podido concluirse ya que la intervención de los militares marroquíes ha sido muy contundente y la protesta se ha saldado con multitud de heridos saharauis”.
Las mismas fuentes señalaban la noche de este martes que barriadas enteras de mayoria saharaui volvían a quedar cercadas por las fuerzas de seguridad. “El barrio de Zemla ya se encuentra totalmente rodeado por militares marroquíes. El aislamiento del barrio es total y ningún saharaui puede salir de su casa”, informó el colectivo Sáhara Libre a las 21:28 horas.
Del mismo modo, la policía y el ejército alauitas entraban en los barrios de Maatala, El Matar, Irak y Wifar, en el inicio de otra noche en que la orden de busca y captura a los organizadores del campamento desmantelado el lunes de Gdeim Izik se salda con numerosas detenciones de jóvenes saharauis.
Los colonos marroquíes habían entrado en todas las casas de saharauis en el barrio de Cataluña y en el barrio de Laporco. “El objetivo es detener a todos los jóvenes saharauis que allí se encuentren. Las listas de detenidos saharauis aumentan alarmentemente”, informaban desde El Aaiún.
Las represalias marroquíes provocaron que a última hora de la tarde mujeres y hombres saharauis acudieran a la Cárcel Negra de El Aaiún para manifestar su rechazo a los cientos de desaparecidos saharauis, siendo entonces atacados por los militares marroquíes que provocaron varios heridos.
Durante la jornada, algunos saharauis cuyos vehículos no han sido quemados por los marroquíes se acercaron al campamento arrasado de Gdeim Izik. Entre sus restos aparecieron dos bebés, encontrados por saharauis que se quedaron los últimos en el campamento de Gdeim Izik, tras la masacre marroqui, entre los escombros de las jaimas.
Los bebés fueron encontrados por jóvenes saharauis que los han trasladado a la ciudad de El Aaiún y se busca a las madres, pero aún están en paradero desconocido., informan las mismas fuentes.
La cifra de muertos sigue siendo una incógnita debido al bloqueo informativo de Marruecos, burlado en parte a través de Internet. “Varios saharauis han acudido al campamento destrozado de Gdeim Izik y han descubierto multitud de cadáveres de saharauis y militares marroquíes, tendidos en el suelo”, revela Sáhara Libre en la Red.
Además, han aparecido también cadáveres de adolescentes a orillas del rio Saguia El Hamra, asesinados durante la ofensiva marroquí del lunes.
La propia Oficina del Ministerio de Territorios Ocupados de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) en el exilio informaba este martes que sobre las 15:30 horas se habían encontrado los cuerpos inertes de tres saharauis a la orilla del río. Dos de ellos muertos a disparos con arma de fuego y otro por aplastamiento con coche.
Alrededor de las cinco de la tarde, un niño saharaui de siete años ha resultado muerto en el barrio de Duerat. “Esta muerte es el resultado de la violencia con la que actúan las milicias de colonos dirigidas por la policía y las agresiones que ejecutan tras los allanamientos de morada”, indica la RASD.
Entre los barrios Hay El Awda y el río Saguia el Hamra, han sido encontrados muertos cuatro saharauis de los que se está procediendo a su identificación.
Por su parte, la activista del movimiento Resistencia Saharaui, Isabel Terrazas, anunció que “se está desencadenando una intifada como la de ayer [este lunes]”, después de una mañana de relativa y “tensa” calma, en la que se han producido escaramuzas en algunos barrios, con especial atención al de Matala.
La activista explica que la Policía y el Ejército marroquí están atacando las casas de los civiles en los barrios de Matala, Jaimatar y Colomina, a la vez que en la Avenida de Forsán, cientos de saharauis se manifestan en contra del desmantelamiento del campamento de Gdeim Izik y la muerte de “un mártir del barrio de Jaimatar”.
En este barrio y los otros dos citados, la Policía “va casa por casa buscando los nombres de una lista que ha elaborado, en la que están los responsables de la instalación del campamento, su seguridad y la distribución de alimentación”. Isabel Terrazas no ha podido concretar el número de personas que en estos momentos buscan los marroquíes “casa a casa”.
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