Ashton: la UE apoyará “la emergencia de una nueva Libia”

ESTRASBURGO (FRANCIA), 9 (EUROPA PRESS)

La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, ha celebrado ante el pleno de la Eurocámara que el Tribunal Penal Internacional (TPI) haya comenzado sus “investigaciones preliminares” sobre “crímenes de guerra” cometidos por el régimen de Muamar Gadafi durante la represión y aunque ha prometido que la UE apoyará “la emergencia de una nueva Libia”, ha insistido en que el cese inmediato de la violencia “es un prerrequisito para todo lo demás”.

“Tenemos que estar preparados para aumentar nuestro apoyo al pueblo libio”, ha explicado la jefa de la diplomacia europea ante el pleno de la Eurocámara, reunido este miércoles para analizar la situación en Libia, incluido con “posibles” recursos a disposición de la Política de Seguridad y Defensa Común, es decir, militares.

Ashton ha adelantado ante el pleno que ha instado a sus servicio a iniciar “la planificación prudente” para analizar los posibles instrumentos de la Política de Seguridad y Defensa Común de la UE que podrían emplearse en Libia, para lo que harían falta “respuestas claras” en cuento al “mandato, recursos y objetivos”, un trabajo que está actualmente en marcha.

Ashton ha insistido en que las “dos prioridades inmediatas” en Libia es resolver la crisis humanitaria y asistir a la evacuación de ciudadanos, apelando a la solidaridad necesaria que debe demostrar la UE y los Estados miembros para ayudar también al millón de egipcios y hasta dos millones de africanos atrapados en la frontera y, en segundo lugar, “garantizar que la violencia cesa y que se responsabiliza a los responsables”.

La jefa de la diplomacia europea ha celebrado que la comunidad internacional ha dejado claro que “la violencia es inaceptable, que debe parar y que hay encontrar los responsables” de la represión y ha recordado que la UE suspendió “inmediatamente” las negociaciones con Libia para firmar un acuerdo marco y toda “cooperación de naturaleza técnica” y ha aprobado sanciones “adicionales” a las aprobadas en el marco de la ONU contra el régimen, incluido el embargo de equipos antidisturbios susceptibles de emplearse para reprimir a la población y la congelación de cuentas y activos financieros y la prohibición de entrada en la UE.

Ashton ha confirmado que los Veintisiete están en proceso de “añadir varias entidades” financieras libias a la lista de sanciones aprobadas, incluido el fondo soberano libio y posiblemente el Banco Central Libio.

La jefa de la diplomacia europea ha prometido que la UE permanecerá “al frente de los esfuerzos internacionales para restaurar la paz” pero “no dictando soluciones sino apoyando el pluralismo” y ha prometido que seguirá trabajando con la ONU, la OTAN y países como Estados Unidos y Turquía para lograrlo.

Aunque Ashton ha reconocido que el cambio “rápido” que se está observando en toda la región del sur del Mediterráneo pone a prueba la capacidad y los recursos de la UE, Ashton ha reclamado “un esfuerzo colectivo” para la región. “No podemos permitirnos pensar en pequeño y que la inflexibilidad sea un obstáculo. Necesitamos una respuesta estratégica y unitaria”, ha insistido.

“El vecindario sur está cambiando rápidamente”, ha recalcado Ashton, a cuyo juicio la UE debe estar “preparada” para apoyar estos cambios. “Tenemos que actuar rápido”, ha insistido.

“Queremos ver esto como un proceso basado en incentivos, diferenciando todos los países”, ha concluido Ashton, insistiendo en la necesidad de impulsar un enfoque de ayuda basado en el principio de “dar más a cambio de más”, de manera que “los países que quieran ir más rápido en las reformas deben contar con más apoyo” europeo.

La jefa de la diplomacia europea ha subrayado la necesidad de apoyar los cambios con recursos “requivalentes a la magnitud” de los mismos y ha celebrado la intención del Banco Europeo de Inversiones de movilizar hasta 1.000 millones de euros adicionales para apoyar infraestructuras en Egipto, al que actualmente tiene previstos comprometer 488 millones.

También ha defendido que la UE apoye “la formación y el intercambio de estudiantes” en la región y contribuir a la “emergencia de una sociedad civil vibrante” en estos países y de “un Gobierno más inclusivo” en estos países y también ha subrayado la importancia de abordar “la seguridad alimentaria” en la región y garantizar “más acceso al mercado” comunitario, un paquete que presentará formalmente a los jefes de Estado y de Gobierno de la UE.