SIDNEY, 17 (Reuters/EP)
Un Boeing 747 de Qantas Airways, que se dirigía a Sidney con 171 pasajeros a bordo, tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia en el aeropuerto de Johannesburgo, tras chocar con un grupo de aves que se introdujo en uno de los motores.
“El piloto siguió el procedimiento estándar y apagó el motor número dos, pero no hubo ningún daño”, informó este miércoles la compañía a través de un comunicado. No obstante, un portavoz indicó que la reparación llevará algo más de un día, ya que han tenido que solicitar las piezas desde Australia.
Este es el tercer incidente del que la aerolínea ha informado en las últimas semanas. El lunes otro Boeing 747, que se dirigía a Argentina con 220 personas a bordo, tuvo que regresar al aeropuerto de Sidney por un fallo eléctrico. Mientras que el pasado 4 de noviembre, uno de sus Airbus 380 aterrizó de emergencia en Singapur, tras perder en pleno vuelo parte de uno de sus cuatro motores.