Gillard por fin podrá formar un nuevo gobierno en Australia

CANBERRA, 7 (EUROPA PRESS)

La primera ministra de Australia, Julia Gillard, ha conseguido el apoyo de tres diputados independientes, de forma que cuenta con mayoría en el Parlamento por un margen de un escaño y podrá formar un nuevo gobierno. Así termina el periodo de incertidumbre que comenzó tras las elecciones del mes pasado, cuando su formación, el Partido Laborista, perdió la mayoría que tenía.

Los independientes Tony Windsor y Rob Oakeshott han revelado este martes su intención de dar sus votos a los laboristas, después de que poco antes hiciera lo mismo el también independiente Bob Katter, según informa la cadena de televisión ABC News. Al haber secundado estos políticos a otro independiente, Andrew Wilkie, y al diputado de Los Verdes Adam Bandt, Gillard se asegura el respaldo de 76 parlamentarios de los 150 que hay en total.

Windsor explicó que dos de los factores principales que le han llevado a tomar esta decisión es el plan del Partido Laborista para ampliar el acceso de los australianos a la banda ancha y su postura respecto al cambio climático, así como que tiene la impresión de que si respalda a la coalición gobernante, ésta convocará elecciones pronto.

Oakeshott, por su parte, dijo que tuvo en cuenta quién podría formar un ejecutivo más estable y quién podría trabajar mejor con un Senado dominado por Los Verdes. Asimismo, indicó que ha habido una oferta para encabezar un ministerio, pero no dio más detalles al respecto.

El apoyo clave de estos diputados a la primera ministra supone un duro golpe para el líder de la oposición, el conservador Tony Abbott, que estuvo muy cerca de ganar las elecciones. Mientras, Gillard ha evitado por poco convertirse en una de las jefas del Ejecutivo que menos tiempo habría estado en el cargo.

Cuando el nuevo Parlamento comience a funcionar, será sometido a una profunda revisión impulsada por los independientes. Habrá un presidente del Parlamento independiente y los comités tendrán nuevas competencias, entre otros cambios.

Las elecciones federales de hace 17 días concluyeron con la pérdida por parte de los laboristas de un gran número de escaños en Queensland y Nueva Gales del Sur y dejaron a los dos grandes partidos sin mayoría por primera vez desde la Segunda Guerra Mundial. Gillard convocó los comicios después de deponer a su predecesor en el cargo, Kevin Rudd --también laborista--, el pasado junio.