OAKLAND (ESTADOS UNIDOS), 3 (Reuters/EP)
Los manifestantes pertenecientes al movimiento popular 'Occupy Oakland', surgido a raíz de las protestas contra el poder de las empresas y los mercados financieros internacionales sobre los gobiernos nacionales, han conseguido detener “de manera efectiva” las actividades en el puerto de la localidad, uno de los mayores del país, según han informado fuentes portuarias.
“En este momento, las operaciones marítimas están detenidas en el puerto de Oakland. Las operaciones en el área marítima se retomarán cuando sea seguro hacerlo”, han afirmado las autoridades a través de un comunicado. El puerto genera unos ingresos de 39.000 millones de dólares (28.503 millones de euros) en importaciones y exportaciones de manera anual.
Miles de manifestantes han bloqueado la principal intersección de la localidad en una huelga para protestar contra las condiciones económicas y la brutalidad policial. Sin embargo, la convocatoria no ha conseguido su objetivo de paralizar por completo las actividades en la ciudad.
Oakland saltó a la línea frontal de las manifestaciones a nivel nacional después de que el ex marine estadounidense Scott Olsen fuera gravemente herido durante una manifestación la semana pasada. Olsen sufrió el impacto de una granada lacrimógena en la cabeza durante las protestas, un incidente que acrecentó la indignación contra las fuerzas de seguridad en la localidad.
Los líderes sindicales locales, que generalmente apoyan estas protestas, han señalado que sus contratos les impiden seguir una huelga oficial. Por su parte, el portavoz del Sindicato Internacional de Estibadores y Almacenadores, Craig Merrilees, ha dicho que cerca de 40 de los 325 trabajadores sindicados hicieron huelga. “El sindicato no llamó a la huelga”, ha subrayado.
“Un gran número de pequeños comercios han cerrado sus puertas (en apoyo a la protesta). Agradecemos que muchos establecimientos de venta de comida hayan permanecido abiertos (para permitir a los manifestantes comprar comida)”, ha afirmado el organizador de la huelga, Cat Brooks.