MOSCÚ, 8 (EUROPA PRESS)
El balance de muertos causadas por las inundaciones registradas en la región de Krasnodar, en el suroeste de Rusia, ha ascendido ya a 141, según ha confirmado este domingo el Ministerio del Interior ruso. Además, no ha descartado que esta cifra continúe aumentando.
La mayoría de las víctimas mortales se han registrado en la localidad de Krimsk, donde viven unas 57.000 personas. Los últimos datos hablan de al menos 130 fallecidos, según ha ratificado un portavoz de Interior. Otras urbes como Gelendzhik y Novorosisk han resultado gravemente damnificadas por las inusitadas y demoledoras inundaciones, si bien el número de muertos es de dos y nueve, respectivamente.
Interior ha asegurado, por otro lado, que la Policía ha rescatado a un total de 150 menores que residían en la localidad de Krimsk. “Hasta 600 policías están trabajando en Krimsk, rescatando a unas 300 personas, incluidos 150 niños”, ha subrayado el portavoz del ministerio. De acuerdo con el Ministerio de Emergencias, más de 10.000 efectivos se encuentran sobre el terreno en las labores de rescate.
Hasta 13.000 personas se han visto afectadas por las inundaciones, razón por la cual las autoridades rusas han declarado el estado de emergencia en las tres ciudades más damnificadas. El agua que calló en algo más de dos horas fue el equivalente a la media de las precipitaciones acumuladas en dos meses.
Las inundaciones golpearon con estrépito la ciudad de Krimsk durante la noche de este viernes, cuando los residentes dormían, lo que explica el elevado número de víctimas mortales. El gobernador regional, Alexander Tkachiov, ha declarado el 9 de julio como día oficial en recuerdo de las víctimas de estas inundaciones, según ha recogido la agencia de noticias estatal rusa, RIA Novosti.
Testigos presenciales han relatado que una ola de siete metros arrasó la ciudad de Krimsk a medianoche procedente de las montañas, donde hay varias reservas acuíferas.
El último antecedente data de 2002 cuando más de 60 personas fallecieron en la región de Krasnodar en unas riadas que se produjeron en un anómalo invierno.
VISITA DE PUTIN
El presidente de Rusia, Vladimir Putin; el ministro de Emergencias, Vladimir Puchkov, y el ministro de Desarrollo Regional, Oleg Govorum, han acudido la región de Krasnodar, acuciada aún por los efectos de las inundaciones.
Al finalizar la visita, Putin ha anunciado una investigación que tratará de aclarar las responsabilidades de las autoridades locales a la hora de advertir de las posibles inundaciones y en las medidas de seguridad puestas en marcha para proteger a la población, según ha informado Reuters.
Putin ha sobrevolado la zona afectada en un helicóptero para, después, montarse en un autobús junto con el alcalde de Krimsk, con quien ha coordinado las próximas acciones a emprender. El presidente ruso ha sido objeto de las críticas en numerosas ocasiones por su lenta respuesta a desastres imprevistos y su respuesta a estas inundaciones serán valoradas como su primer examen del mandato.
El chequeo de las reservas de agua situadas en las montañas aledañas a las tres ciudades más afectadas por las inundaciones, además de cerciorarse de la seguridad de los campos donde se han realojado a los damnificados son las otras prioridades para el Ministerio de Emergencias en los próximos días.
Aunque las lluvias podrían cesar el lunes, las actividades portuarias en el Mar Negro, un importante enclave en la distribución mundial de crudo, podrían reanudarse este domingo. Por contra, no se ha dilucidad cuándo podrán volver los damnificados a sus hogares para evaluar los daños debido al estado anegado de las calles.