BEIRUT, 12 (Reuters/EP)
Los observadores de la ONU en Siria han sido atacados este martes por una multitud que, con piedras e incluso a tiros, ha impedido su entrada en la localidad de Haffeh, según ha explicado una portavoz de Naciones Unidas, Sausan Ghosheh, en un comunicado.
“Los observadores que intentan alcanzar la localidad de Haffeh fueron recibidos por una multitud de personas enfadadas que rodearon sus vehículos y les impidieron que siguiesen avanzando”, ha informado Ghosheh.
La portavoz había asegurado horas antes que los integrantes de la misión no podían entrar en la localidad de Haffeh porque “no es segura” y la vida de estos enviados correría peligro.
Los observadores “están en el último puesto de control” antes de llegar a Haffeh e incluso el Gobierno les ha dicho: “Podéis pasar”. Sin embargo, “les parece inseguro” seguir adelante, dijo Ghosheh en declaraciones a Reuters.
Los choques en esta zona comenzaron el martes de la semana pasada después de que las fuerzas del Gobierno instalasen puestos de control para extender su influencia en esta zona, cercana a la ciudad de Latakia y a la frontera turca, y ruta habitual para el traslado de personas y suministros.
Haffeh, de mayoría suní, se encuentra en una zona montañosa dominada por la comunidad alauí, escisión del chiísmo a la que pertenece la familia del presidente, Bashar al Assad.
Los primeros enfrentamientos entre rebeldes y tropas del régimen han derivado en un asalto contra la ciudad que ha atraido la atención de la comunidad internacional. El mediador de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, ha pedido el acceso de los observadores internacionales a esta zona, al tiempo que Estados Unidos ha alertado de una “potencial masacre”.